La mítica compañía de discos Sub Pop cumple 20 años. La discográfica que Nirvana hizo grande celebra este fin de semana un gran festival para gritarle al mundo que sigue en el negocio, le va bien y no ha traicionado sus principios. Muchas de las bandas que hoy forman el ejército Sub Pop se dieron cita ayer y lo harán hoy hasta media noche en el Marymoor Park de Seattle. Grupos como The Fleet Foxes, Iron and Wine o The Vaselines, que eran el grupo favorito de Kurt Cobain, participan en el homenaje.
Y es que Sub Pop nunca fue una 'label' cualquiera. El esfuerzo por mantener la filosofía de lo independiente pero sin dejar de lado el éxito y el dinero han conseguido que forme parte de la historia de la música y de la ciudad de Seattle. Además de Starbucks, Sub Pop puso la ciudad en el mapa mental de millones de jóvenes. De hecho miles de turistas acuden en peregrinación para visitar sus instalaciones y los lugares por donde se dejaba caer el dios del grunge, Kurt Cobain.
Bruce Pavitt y Jonathan Poneman fundaron Sub Pop en 1987. Innovaron con un servicio de suscripción mensual donde se enviaba por correo los sencillos de las bandas locales más interesantes del momento. El primer single que se envió fue Love Buzz/Big Cheese, de Nirvana. Ésta no era la primera compañía independiente, pero sí era la primera en conseguir éxito y mucho dinero en poco tiempo.
Ahora Pavitt y Ponemam son sólo consejeros de la discográfica, cuyo 49% pertenece al gigante Time Warner. "Desde que dejé Sub Pop vivo en Orcas Island a un par de horas al Norte de Seattle. Me he vuelto a casar recientemente y tengo tres hijos. Los niños me mantienen ocupado. He estado 17 años centrado obsesivamente con el indie rock. Así que tomé la decisión de marcharme y experimentar otras cosas en la vida a parte de coger el teléfono móvil" ha declarado el fundador Bruce Pavitt a Pitchfork en una reciente entrevista con motivo del aniversario.
El nacimiento de esta discográfica, que supo apreciar y darle la bienvenida al grunge como se merecía, marcó un antes y un después; con ella nacía el mecanismo para distribuir un nuevo estilo, una nueva forma de vida que rápidamente cautivó a los adolescentes de medio mundo. Y así se extendió el movimiento grunge, con su subcultura, su desaliñada imagen y su particular forma de entender la juventud. Luego vendría la respuesta cinematográfica con películas como 'Reality bites' y el mundo de la moda rendido a sus pies.
Pero lo importante de Sub Pop es que la gente confiaba en en ella. Si un grupo había fichado por la compañía de Seattle era una garantía de calidad. Y es que grupos como Soundgarden o Nirvana eran un buen aval. Aunque luego estas bandas acabarían marchándose a grandes multinacionales, como hizo Nirvana en 1990.
Pero Sub Pop no se ha quedado viviendo de las rentas del pasado y ha seguido fichando a muchos de los mejores grupos del panorama indie rock internacional. Los brasileños CSS, The go Team!, The Postal Service o The Shins son buena prueba de ello. Sin perder la coherencia, la discográfica ha continuado trabajando para dar al público un poco de diversión y entretenimiento, que al final es lo que todos esperamos de la música. Pero siempre con gusto y sabiduría. ¡Felicidades Sub Pop, gracias sonido Seattle!
Vea la galería de imágenes del festival de Sub Pop en Seattle Post Intelligencer.
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