El PP no logra que el Congreso apoye sancionar a los convocantes de referendos ilegales

Madrid.-  Todos los grupos parlamentarios han votado hoy en contra de una proposición no de ley, presentada por el PP en el Pleno del Congreso, que pedía al Gobierno una reforma legal para sancionar penalmente a quien convocara un referéndum "careciendo de competencias para ello".

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(EFE)

El portavoz parlamentario del PP, Eduardo Zaplana, durante la rueda de prensa posterior a la reunión de la Junta de Portavoces del Congreso de los Diputados.

Los populares han abogado por esta medida, según consta en la exposición de motivos de la iniciativa, para evitar el "asedio que, con la complacencia del Gobierno, han venido planteando al Estado los nacionalismos radicales", como la convocatoria del lehendakari, Juan José Ibarretxe, y la pretensión de organizar un referéndum en Cataluña del vicepresidente autonómico, Josep Lluís Carod-Rovira.

El resto de grupos parlamentarios han tachado de inoportuna esta iniciativa del PP y han lamentado que el texto haya sido presentado por los populares con ánimo "electoralista".

El portavoz del PP en la Comisión de Justicia, Ignacio Astarloa, ha insistido en el Pleno que después de la "formalización del desafío", por parte del lehendakari, al Gobierno sólo le queda rectificar, volver a la ley frente a la no aplicación de la misma por circunstancias políticas "ligadas" al proceso de diálogo con ETA y renunciar a las concesiones.

"Ya estamos en lo peor", ha proseguido el portavoz del PP, quien ha atribuido la situación al "fracaso de la política de Zapatero para que los nacionalistas se sientan cómodos en su nueva España plural".

Según Astarloa, si el ordenamiento no se dota de los medios para evitar los referendos de secesión anunciados no hay más que dos respuestas: o permiten que se celebre con la complacencia del Gobierno, o tendrían que recurrir a los instrumentos extraordinarios.

"La situación que tenemos por delante es muy grave y peligrosa", ha añadido el portavoz del PP, para quien el Gobierno aún está a tiempo "de corregir sus errores".

Todas estas acusaciones han sido rechazadas por Ramón Jáuregui (PSOE), quien ha asegurado que la propuesta de los populares pretende "penalizar la discrepancia política y la política misma".

Después de oponerse a la "visión melodramática sobre España" del PP y su "visión equivocada", el parlamentario socialista ha rechazado la propuesta del lehendakari y ha afirmado que el Gobierno hará cumplir la ley.

Jáuregui ha precisado que intentar incluir las convocatorias de referéndum en el Código Penal es "inconveniente, exagerado y contrario al espíritu de las leyes", ya que existen otros mecanismos para evitar este tipo de consultas, cuya competencia es estatal.

"Las consultas y los referendos exigen la autorización del Gobierno, y si el Gobierno no la da no hay referéndum. Se ha acabado", ha añadido el diputado del PSOE, quien ha recordado que militantes populares recogieron firmas para convocar una consulta sobre el Estatuto catalán.

El diputado de CiU Josep María Guinart ha opinado que esta iniciativa de los populares responde a una "estrategia preelectoral" para reforzar su "imagen", "fidelizar a su electorado" y "cazar" algún voto más.

De manera parecida se ha expresado Margarita Uría (PNV), que ha acusado al PP de intentar "calentar la campaña electoral" y de intentar intimidar de manera fallida a Ibarretxe.

Desde ERC, Agustí Cerdá ha puesto de relieve la "casualidad" de que el PP presente esta iniciativa el mismo día que se cumplen 32 años de la muerte de Franco y ha considerado que "igual" era la "manera macabra" de los populares de celebrar el 20-N.

Por su parte, el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, ha asegurado que el PP quiere "responder a las moscas con cañonazos" y ha lamentado que los populares cada día practican más un "patriotismo penal" que "constitucional".