Merkel defiende el camino lento hacia el equilibrio presupuestario

Berlín.-  La canciller alemana, Angela Merkel, defendió hoy la línea de la gran coalición de caminar pausadamente hacia el equilibrio presupuestario y no buscar ya ahora el déficit nulo, tal y como se lo exige la oposición ante la bonanza económica.

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(EFE)

La canciller alemana, Angela Merkel, defendió hoy la línea de la gran coalición de caminar pausadamente hacia el equilibrio presupuestario y no buscar ya ahora el déficit nulo.

En el debate parlamentario sobre los presupuestos generales del Estado para 2008, Merkel sostuvo que la clave del éxito económico de Alemania ha sido precisamente la estrategia de la gran coalición de conjugar el saneamiento con reformas e inversiones.

Ello implica, explicó, que para poder invertir en investigación y desarrollo, en formación y en las familias, el Estado debe seguir recurriendo al endeudamiento.

Los presupuestos del Estado para 2008 contemplan un gasto de 283.200 millones de euros, lo que supone un incremento de 12.700 millones frente a de este año.

El endeudamiento bajará a 11.900 millones de euros, la tercera parte del nivel de hace dos años.

La oposición liberal y verde exigió hoy de nuevo al gobierno que aproveche la actual fortaleza económica y, sobre todo, el fuerte incremento de la recaudación fiscal, para alcanzar un déficit nulo ya en 2008.

Merkel, en cambio, volvió a subrayar su intención de lograr este objetivo en 2011 y lo argumentó con la necesidad de hacer una política abocada a fomentar el crecimiento económico y crear empleo.

"El principio de nuestra política es hacer todo aquello que sirva para crear empleo y dejar todo aquello que lo destruya", subrayó la líder cristianodemócrata.

Recordó que desde que la gran coalición asumió el gobierno en 2005, el número de parados ha disminuido en un millón, y que en 2008, el desempleo se habrá reducido a la mitad respecto al comienzo de la actual legislatura.

"Nuestra política está surtiendo efecto, pero no podemos descansar sobre nuestros laureles", señaló.

Reconoció que el elevado precio del crudo, la crisis hipotecaria en EEUU y la fortaleza del euro albergan una serie de riesgos para Alemania, pero se mostró convencida de que la economía está lo suficientemente bien equipada para afrontarlos sin sufrir grandes trastornos.

En materia internacional, Merkel alabó los resultados de la conferencia de Paz para Oriente Medio de Annapolis, lanzó una nueva advertencia contra Irán, y pidió sensatez a la hora de buscar una solución sobre el futuro estatus de Kosovo.

También emplazó a los países de la Unión Europea a redoblar sus esfuerzos en la lucha contra el cambio climático, a fin de servir de ejemplo a nivel internacional.

Mientras que los informes apuntan a que Alemania alcanzará hasta 2012 los objetivos de reducción de emisiones a los que se comprometió en el protocolo de Kioto, la UE en su conjunto "está lejos de ello", insistió.

También se defendió de las reprimendas que ha escuchado en las últimas semanas -entre otros, del socio de coalición- a la línea crítica que ha seguido frente a China y Rusia, y recalcó que su convicción es que se puede reclamar el cumplimiento de los derechos humanos y a la vez mantener buenas relaciones económicas.

Su reunión con el Dalai Lama, a finales de septiembre pasado, había suscitado no sólo las críticas de Pekín, que desde entonces ha cancelado una serie de reuniones bilaterales, sino también del socio socialdemócrata que lo vio sólo como un gesto "para la galería" .

El líder del grupo parlamentario de La Izquierda, Gregor Gysi, acusó a Merkel de aplicar el doble rasero a la hora de reclamar el respeto de los derechos humanos y no hacerlo frente a amigos, como Estados Unidos o Arabia Saudí.