La víctima había denunciado al homicida por amenazas, pero rechazó protección

Barcelona.-  La mujer que ayer murió apuñalada por su compañero sentimental en Vilanova del Camí (Barcelona) lo había denunciado por amenazas hace menos de un mes, pero rechazó la orden de protección que le ofreció el Juzgado porque posteriormente se reconcilió con él.

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(EFE)

Puerta precintada del 2º 3ª del número 33 de la Calle Fr. Junípero Serra, donde falleció Marioli Gutiérrez (Bolivia), presuntamente a manos de su compañero de la misma nacionalidad, detenido esta tarde en Sant Feliu de Llobregat (Barcelona).

Según han informado a Efe fuentes judiciales, el presunto autor del crimen, Luciano C.J., de 42 años y nacionalidad boliviana, fue denunciado por la víctima el 29 de octubre pasado y detenido por los Mossos d'Esquadra, que el 31 de octubre lo pusieron a disposición judicial.

El Juzgado de Instrucción número 4 de Igualada dejó al detenido en libertad con cargos, acusado de un delito de amenazas en el ámbito familiar, y no dictó ninguna orden de protección o alejamiento respecto a la víctima, porque ella lo rechazó.

En su comparecencia en el Juzgado para ratificar la denuncia, la mujer aseguró al juez que había perdonado a su compañero sentimental y que ambos habían decidido volver a vivir juntos y replantear su convivencia, por lo que no quería que se le dictara una orden de protección.

La declaración de la denunciante, de 28 años, motivó que el Juzgado suspendiera el juicio de faltas rápido que tenía previsto celebrar ese mismo día contra el detenido por un presunto delito de amenazas en el ámbito familiar, según las mismas fuentes.

No obstante, el Juzgado acordó mantener abiertas las diligencias penales contra Luciano C.J. por un delito de amenazas, ya que no constaba parte de lesiones que indicara que la mujer había sido maltratada físicamente, y tenía previsto juzgarlo el próximo 11 de febrero.

Según ha explicado hoy a Efe el alcalde de Vilanova del Camí, Joan Vich, el presunto agresor clavó dos puñaladas a su mujer hacia las cinco de la tarde de ayer y, posteriormente, se fue a recoger al colegio a dos hijos de la pareja, que tienen 8 y 9 años.

Después de llevarlos a casa de unos familiares en Sant Feliu de Llobregat (Barcelona), el detenido se entregó en la comisaría de la población y se confesó autor del crimen.

Los Mossos d'Esquadra se trasladaron entonces al domicilio de la pareja, situado en la calle Francesc Junipero Serra de Vilanova, y encontraron el cadáver de la mujer con indicios de haber sido apuñalada.

El matrimonio, de origen boliviano, hacía dos años que vivía en Vilanova del Camí con sus tres hijos, el mayor de los cuales, de 14 años, era fruto de una relación anterior del presunto homicida y desde hacía unos días se había trasladado a Sant Feliu de Llobregat.