La sala CAM de Murcia expone una reflexión de Botero sobre la violencia de Colombia en 67 obras

Murcia.-  La sala de exposiciones de Caja Mediterráneo (CAM) en la glorieta de España, de Murcia, acoge hasta el 27 de enero de 2008 la muestra "Botero. Una mirada diferente", con 67 obras del artista colombiano, 25 óleos y 42 dibujos, en las que ofrece su particular visión sobre la violencia de su país natal.

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(EFE)

Un visitante observa un cuadro del pintor y escultor colombiano Fernando Botero en la sala de exposiciones de Caja Mediterráneo (CAM).

La exposición, presentada hoy por su coordinadora, Marta Franch, y el director de la obra social de la CAM, Juan José Mouliáa, y que procede del museo Nacional de Colombia, al que Botero donó estas obras, el asunto tratado se aleja del concepto del arte como productor de placer.

"En vista de la magnitud del drama que vive Colombia, llegó el momento en el que sentí la obligación moral de dejar un testimonio sobre un momento tan irracional de nuestra historia", dice Botero en el catálogo de la muestra, donde Santiago Londoño afirma que "en sus pinturas evoca las casas, los pueblos, los paisajes, los personajes y las costumbres de un 'mundo amable'. Pero, según el artista, Colombia 'también tiene esa cara terrible de la violencia'".

En su opinión, en esta serie de obras "la línea como que quiere hacer un paréntesis en el virtuosismo que ha emparentado a Botero con Ingres".

"Es como si un velado desespero o un nudo en la garganta guiara con apremio la mano que envuelve las formas mediante el grafito o la sanguina. Es precisamente en esos dibujos donde se aprecia con mayor insistencia la expresión facial y corporal de estados emocionales relacionados con la violencia y sus consecuencias", añade Londoño.

Con estas pinturas y dibujos, Botero trata de mostrar los difíciles pasajes y circunstancias que han afectado a sus compatriotas colombianos durante años retratando la sensibilidad de un pueblo del "que no se puede vivir de espaldas", como dice el artista en el texto del catálogo "Testimonios de la barbarie".

La coordinadora de la exposición destaca el sentimiento que vivió cuando por primera vez vio esta colección de Botero, "que explica en caras anónimas una realidad que no sólo pasa en Colombia, sino también en lugares donde se viven situaciones de conflicto".

Franch subraya que el título "Botero. Una mirada diferente", responde al hecho de que se trata de cómo a través de "la otra mirada del artista" llegamos a encontrarnos con la realidad de una situación que muchas veces vemos lejana, como es guerra o la corrupción".

El asunto de la violencia tiene antecedentes en la obra de Fernando Botero, pues en 1973 pintó "Guerra", donde amontona a militares, sacerdotes, mujeres y niños como si se tratara de un campo de batalla, informa la organización en una nota de prensa.

Estas imágenes, señala la CAM, "no invitan a la rebeldía o a la movilización social, y carecen de una filiación ideológica, de un proyecto político, de una enseñanza moralizante e incluso de una voz de esperanza".

"El compromiso -agrega- sigue siendo con el arte mismo, con las necesidades expresivas del creador y con sus propias leyes. Se trata de una mirada compasiva, exacerbada y solidaria, dotada del más alto sentido ético y estético, y que ofrece un testimonio personal ineludible para el más indiferente, para que no se olviden tantas vidas que ha segado la barbarie".

En el comunicado, Mouliáa sostiene que en la CAM están "convencidos de que el arte es un arma contra todo tipo de violencia, la mejor arma, porque es inofensiva".