El 45% de los palmesanos soporta un ruido superior al permitido de día y el 40% de noche

Palma.-  El 45,2 por ciento de la población de Palma está expuesta a umbrales ruido superiores a los permitidos durante el día, mientras que por la noche lo está el 40,3 por ciento de los ciudadanos, según el mapa estratégico de ruido elaborado por el Ayuntamiento de Palma.

En concreto, los límites de sonido que recomienda la Organización Mundial de la Salud y que desde el pasado 19 de octubre son también los establecidos en la legislación estatal son los 65 decibelios en horas diurnas y los 55 en nocturnas, por encima se considera que el ciudadano está expuesto a ruido.

Así lo ha explicado hoy la concejala de Medio Ambiente de Cort, Maria Cristina Cerdó, quien ha presentado este estudio, que destaca como principal fuente de ruido en la ciudad el tráfico de vehículos, y ha ampliado que el mapa permitirá ejecutar antes de agosto del año que viene un plan de acción para corregir la situación y cambiar más adelante la ordenanza municipal sobre ruidos.

El mapa, aprobado inicialmente el pasado lunes en el pleno de Palma, está elaborado por la Universidad Politécnica de Madrid y tiene en cuenta las fuentes sonoras de más repercusión en la ciudad, que son el tráfico de vehículos, el ferroviario y las relacionadas con las actividades lúdico-deportivas.

El ruido de actividades industriales se han descartado porque "no son especialmente ruidosas", así como las zonas del aeropuerto y del puerto, ya que éstas requieren un estudio propio.

El estudio tiene en cuenta los ruidos de día (de 7.00 a 19.00 horas), tarde (19.00 a 23.00 horas) y noche (de la medianoche a las 7.00 horas).

Según indica, las zonas con la fuente de ruido más importante, generada por el tráfico, son, fuera del casco urbano, la Vía de Cintura, la Avenida Gabriel Roca y la Autopista de Levante; y en la ciudad, Avenidas, las calles Balanguera, Andreu Torrens, Ausias March, Rosselló y Cazador y Jaume Balmes, entre otras, con niveles superiores a los 75 decibelios de día.

El plan de acción que se piensa realizar a partir del mapa, y en el que el Ayuntamiento ya está trabajando, ha dicho Cerdó, activará medidas de corrección, en especial en las zonas que superan límites de ruido, y de prevención, para que se mantengan bajos los niveles en las zonas que todavía son tranquilas.

Este se realizarán de manera conjunta con otras instituciones, ha ampliado la concejal de Medio Ambiente, que ha señalado que el paso siguiente será modificar la ordenanza municipal, ya que la actual es de 1995, está obsoleta y debe adaptarse a la normativa autonómica y estatal.

Cerdó ha remarcado además que el mapa permite ver que el nivel de ruidos de Palma es muy parecido al del resto de ciudades españolas de más de 250.000 habitantes, aunque, cuando se le han pedido datos más concretos, ha señalado que la mayoría de urbes no han presentado todavía sus mapas al Ministerio y que no dispone de la información de las que sí lo han hecho, que son Valencia y Alicante.