Cerca de 10.000 concentrados en Castilla y León, contra la violencia terrorista

Valladolid.-  Cerca de 10.000 personas se han concentrado hoy contra el terrorismo ante los consistorios de las nueve capitales de provincia de Castilla y León, Comunidad a la que están vinculadas las familias de los dos guardias civiles que sufrieron un atentado de ETA el pasado sábado en Francia.

ampliar foto

(EFE)

Concentración en El Tiemblo (Ávila) este mediodía en repulsa por el atentado del pasado sábado en Capbreton (Francia).

Las concentraciones se han desarrollado en respuesta a la convocatoria de la Federación de Municipios y Provincias (FRMP) y de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), tras el atentado terrorista en el que perdió la vida el guardia civil Raúl Centeno, cuya familia paterna es oriunda de Vega de Infanzones (León), y sufrió heridas muy graves su compañero Fernando Trapero, cuyos padres nacieron en El Tiemblo (Ávila).

Ha sido precisamente esta población abulense la que ha registrado una de las concentraciones más numerosas, con unos 3.000 participantes.

El alcalde de esta localidad, Rubén Rodríguez, ha dicho a Efe que los vecinos están "indignados, porque no se explican cómo dos guardias civiles pueden estar desarmados y rodeados de asesinos en Francia".

"En estos momentos tenemos que estar unidos a la familia de Fernando Trapero para transmitirle fuerzas a su hijo para que siga adelante", ha afirmado el regidor tembleño.

En Vega de Infanzones, medio centenar de personas se han reunido en silencio a las puertas del consistorio de esta población de 960 habitantes, cuyo alcalde, Máximo Campano, ha manifestado a Efe que los residentes "ya van asimilando la tragedia y se van haciendo a la idea de lo que ha ocurrido, aunque el sentimiento de dolor que tienen es muy fuerte".

Ha agregado que "no nos podemos quedar con los brazos cruzados esperando a que nos maten" y ha opinado que "el Gobierno tiene que actuar, porque esto es lo que no puede ocurrir".

En las capitales de provincia, Salamanca contó con la asistencia de unas 2.000 personas; unas ochocientas en Ávila y Palencia, respectivamente; quinientas en Valladolid, el mismo número que en Zamora; trescientas en León y Burgos, en cada caso; doscientas en Segovia y 150 en Soria.

A la concentración de Burgos, ha asistido la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, quien ha retrasado el horario previsto de visita a las obras del aeropuerto y la variante ferroviaria, con el fin de poder acudir a la protesta silenciosa.

"Con unidad, firmeza y serenidad redoblaremos el esfuerzo en la lucha contra el terrorismo", ha dicho la ministra en declaraciones a los periodistas.

En Segovia, el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, ha pedido un minuto de silencio en señal de duelo, antes del acto de entrega de los premios "Cándido".

Previamente, en Valladolid, Herrera ha insistido en declaraciones a los periodistas en responder al terrorismo con la "unidad sin fisuras" de todas las fuerzas políticas y sociales, como demandan los ciudadanos, y ha advertido a ETA de que "no hay caminos intermedios" salvo su "desaparición".

La mayor parte de las concentraciones se ha desarrollado en silencio y en algunas de ellas se han escuchado gritos de "viva la Guardia Civil", además de otros aislados en los que se pedía la dimisión del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

A las concentraciones han acudido representantes de administraciones, políticos, de los sindicatos, empresarios y de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.

En Valladolid, un centenar de personas discapacitadas, que visitaban durante esta jornada la sede de las Cortes regionales, protagonizaron una concentración silenciosa y guardaron un minuto de silencio para repudiar el atentado de la banda asesina ETA.