"El caballero de la medianoche", lo "más comercial" del dominicano Sierra

Santo Domingo.-  "El caballero de la medianoche", la nueva película del realizador dominicano Jimmy Sierra, es el producto "más comercial" del experimentado director, que confiesa haber "cedido" a los requerimientos de un mercado que exige "humor, exceso y terror".

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(EFE)

"El caballero de la medianoche", la nueva película del realizador dominicano Jimmy Sierra, es el producto "más comercial" del experimentado director, que confiesa haber "cedido" a los requerimientos de un mercado que exige "humor, exceso y terror".

A estrenarse el 31 de enero próximo en los cines dominicanos, el "thriller" de Sierra no tiene mayores pretensiones que ofrecer 90 minutos de expectación en torno a una trama tradicional.

"He hecho una pequeña pausa en los temas culturales y educativos que toco en mis películas para rendir tributo a las líneas comerciales que exigen los tiempos, aunque esto no signifique el abandono de mis posiciones", sostuvo Sierra en entrevista con Efe.

El cambio de enfoque lo atribuye el director, que además es el productor y guionista del filme, a la "necesidad" que impone el medio a través de las tres "líneas maestras" en el arte cultural: diversión, evasión y la conformación con el 'status quo'.

"El caballero de la medianoche" es un violador y asesino de mujeres que al escoger a sus eventuales víctimas utiliza técnicas sutiles para seducirlas, pero es presa de sentimientos aberrantes que lo arrastran al crimen.

A medida que el filme avanza, la persecución del sujeto se hace más complicada debido al surgimiento de un sinnúmero de potenciales sospechosos que al ir siendo descartados, conducen a la sorpresa final.

"Uno de los temas claves de la película toca a la Iglesia Católica a través de una monja, muy moderna, quien se debate entre una serie de circunstancias existenciales, que la colocan en una disyuntiva resuelta, aparentemente, de una manera correcta", explicó Sierra.

Otra situación a la que el realizador da gran importancia dentro de la cinta es la relación de colaboración entre la Policía y la prensa, que da lugar a conflictos éticos en esta última.

"Sin embargo, hay una actuación magistral a cargo de una niña de cinco años, graciosa, que resulta el hilo conductor de la cinta (...) una niña excepcional que desde que la vimos sabíamos que era la adecuada para ese rol", opinó.

La película de bajo presupuesto fue filmada en locaciones de Santo Domingo, y tiene en los roles principales a Roberto Payano y Wallis Uribe, integrantes de un cuerpo elite de la Policía en el que todos sus miembros tienen la cabeza rapada, incluyendo a la protagonista.

"En esta cinta vuelvo a utilizar actores de teatro porque responden cabalmente a mi técnica de dirección de diálogo y circunstancia, que permite a los intérpretes enriquecer su actuación", detalló el cineasta.

Sierra, quien recientemente puso en circulación varios cuentos animados para niños, tiene en su haber cuatro largometrajes y varias series de televisión, y ha sido también un narrador de la historia reciente de República Dominicana.

"Esta producción significa un cambio dialéctico en el profesor (Sierra), un trabajador de la cultura, el cine, el teatro y la televisión del país", dijo por su parte, Payano, por segunda vez a la órdenes del director.

El actor ve la película como un "relax", que toca "ligeramente" la sociología del ciudadano dominicano, aunque llama la atención en torno a los índices alcanzados por la delincuencia en la nación.

La película depara un pequeño rol al ex jefe de la Policía, Bernardo Santana Páez, quien se interpreta a sí mismo.