Malformaciones embrionarias de madres gestantes tratadas con inmunosupresores

Valencia.-  Investigadores del Hospital La Fe de Valencia han descrito por primera vez en la literatura médica un patrón específico de malformaciones embrionarias producidas en fetos de madres que habían tomado un medicamento inmunosupresor durante la gestación, según han informado fuentes del centro hospitalario.

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(EFE)

Un médico realiza una ecografía a una mujer embarazada.

La alteración afecta principalmente a estructuras craneofaciales, y a órganos internos, de manera que, por ejemplo, la boca presenta alteraciones como labio superior evertido, labio leporino o fisura palatina, mientras que en pabellón auricular afecta al pabellón auditivo externo, lo que provoca sordera.

También puede aparecer afectación del maxilar con mandíbula inferior más pequeña de lo normal y región frontal con separación excesiva de las paredes de la órbita de los ojos.

Finalmente, se pueden apreciar otras malformaciones severas, como agenesia del cuerpo calloso, defectos de corazón, de las extremidades con polidactilia, del riñón y hernia diafragmática.

Según fuentes del centro hospitalarios, las madres habían ingerido durante el embarazo micofenolato de mofetilo (MMF), medicamento usado para evitar el rechazo de órganos después de los trasplantes o como tratamiento de lupus sistémico.

Los investigadores han constatado que en el caso de que las madres ingieran inadvertidamente dicho medicamento durante la fase de la formación del embrión (8-12 semanas de gestación), los bebés pueden presentar una serie malformaciones hasta en un 26 por ciento de los casos.

Según los investigadores, la exposición intraútero a MMF produce un patrón de malformación específico por la acción deletérea del fármaco sobre las estructuras embrionales en formación, que dan origen a una embriofetopatía, que se define por la presentación de rasgos malformativos característicos.

El equipo médico investigador inició su trabajo a partir de una paciente con trasplante renal que quedó embarazada dos años más tarde de la intervención, mientras estaba siendo tratada con MMF para evitar el rechazo del órgano.

Tras una revisión exhaustiva de la literatura médica, los investigadores encontraron hasta 10 casos más de bebés nacidos de madres que habían recibido tratamiento con este inmunosupresor (MMF) y que presentan rasgos malformativos similares atribuibles al fármaco.

Uno de los investigadores, el doctor Vento, ha explicado que tras un "exhaustivo análisis concluimos que existía un fenotipo característico asociado con un efecto teratogénico provocado por el tratamiento con MMF".

Los resultados de este estudio han sido publicados en el American Journal of Medical Genetics, revista científica que también ha dedicado un editorial por la importancia de este hallazgo.

Según las mismas fuentes, la capacidad de producir malformaciones fetales que el uso del medicamento podía producir había sido descrita en la literatura científica en animales de experimentación a dosis elevadas y en algún caso aislado. De hecho, en la ficha de registro del medicamento, el propio fabricante alertaba sobre esta posibilidad.