El Fandi y Talavante salen a hombros de la plaza

Almendralejo (Badajoz).-  David Fandina "El Fandi" y Alejandro Talavante han salido hoy a hombros de la plaza en la corrida que ha abierto la temporada en la provincia pacense, con tres orejas en la mano cada uno, mientras que Rivera Ordóñez obtuvo un trofeo.

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(EFE)

El diestro David Fandila "El Fandi" da un pase con la muleta a uno de sus toros duranta la corrida celebrada hoy en la plaza de toros de Almendralejo, en la que se han lidiado reses de Manolo González y Sánchez Daplp.

Se lidiaron seis toros de Manolo González y González Sánchez-Dalp, de aceptable presentación y juego, que en general entusiasmaron a las más de 2.000 personas que ocuparon la mitad del aforo de la plaza en tarde fría y desapacible.

Francisco Rivera Ordóñez. Saludos. Una oreja.

David Fandina "El Fandi". Una oreja. Dos orejas.

Alejandro Talavante. Una oreja. dos orejas.

A Rivera Ordóñez le tocó en suerte un toro recortadito, que evidenció su falta de fuerzas y casta, por lo que el torero hubo de medirlo y tantearlo para darle la lidia adecuada dictada por su experiencia profesional, que consiguió transmitir al público, que lo agradeció con sus aplausos.

La buena disposición del maestro supo suplir la deficiencia del animal mediante una faena corta pero con cierto regusto, aderezada de una estocada que no fue suficiente para la obtención de trofeo.

En el cuarto de la tarde, el público le pidió la ejecución del tercio de banderillas con lo que obtuvo sonoros aplausos ante un toro que no le presentó dificultades y le permitió cuajar una faena limpia y vistosa que abrochó de estocada caída y descabello.

David Fandina "El Fandi" destacó en el tercio de banderillas, como es habitual en él, para ya con el terreno prácticamente adobado tantear por bajo al animal que, falto de fuerzas, dobló las manos.

Suavemente tiró de él cuajando algunos muletazos de buen ver pero de escasa emoción, dada la ausencia de transmisión del astado que le cupo en suerte. Mató a la primera y fue premiado con una oreja.

Con el quinto de la tarde formó la bulla en banderillas donde el toro se apagó y deslució su labor en el último tercio, pese a la insistencia por agradar del torero, que consiguió en parte. Mató bien y el presidente, muy generosamente, le concedió las dos orejas.

Alejandro Talavante recibió con suavidad y buen gusto al primero de su lote para esbozar una faena artística, cuajada de quietud que levantó el entusiasmo de un público que lo aplaudió a rabiar.

Talavante puso calor a la fría tarde ofreciendo series con ambas manos a un toro que le obedeció. Muy puesto y seguro estuvo el torero de Badajoz, que subrayó su labor de una estocada rematada con el verduguillo.

Con el que cerró plaza, se dejó ver en la ejecución de una faena maestra realizada con la mano izquierda. Firme y templada, que prendió la atención del respetable, que lo jaleó con unánimes aplausos, proclamándole la mejor y más torera faena de esta corrida que abrió la temporada en la provincia pacense.

Por Fernando Masedo Torres.