Madrid.- El Pleno del Congreso de los Diputados aprobó hoy de nuevo el límite de gasto no financiero del Presupuesto del Estado para 2009, con el único apoyo del Grupo Socialista, el voto en contra del PP, UPyD y ERC-IU-ICV, y la abstención del resto de grupos.
Esta es la segunda vez que el Congreso aprueba el techo de gasto, después de que el pasado martes el Pleno del Senado lo rechazara, al recibir únicamente los apoyos del Grupo Socialista, los de los diez senadores socialistas catalanes integrados en Entesa Catalana de Progrés y cinco senadores del Grupo Mixto.
Durante su intervención, el vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, afirmó que el objetivo de estabilidad presupuestaria diseñado por el Gobierno para los próximos tres años es el adecuado para unas tasas de crecimiento previstas en el entorno del 2 por ciento.
El vicepresidente destacó la "profunda" desaceleración en el crecimiento de la economía española, debida a factores externos e internos.
Solbes recordó que el cuadro macroeconómico se estructura en función de los datos que se tienen en el momento de su diseño, por lo que señaló que, como consecuencia de ello, esos "desfases temporales" pueden tener un impacto en ese cuadro.
Tras la votación, indicó que el hecho de que el techo de gasto fuera aprobado sólo con el apoyo del PSOE, no refleja un aislamiento por parte del Gobierno y añadió que la abstención es un comportamiento "responsable", en el sentido de que "se quiere un presupuesto y luego discutirlo".
Solbes señaló que una reducción del gasto de manera significativa tendría un impacto negativo en el crecimiento y subrayó que si lo estabilizadores automáticos "juegan su papel" y ese crecimiento es menor de lo previsto "tendrá una incidencia presupuestaria".
Además, se refirió a la deducción fiscal de 400 euros y aseguró que con la información que se tiene actualmente esta medida "se hubiera estructurado o configurado de forma distinta, pero no su parte sustancial".
En el debate, el responsable económico de CiU, Josep Sánchez Llibre, acusó al Gobierno de hacer unas previsiones "optimistas y difíciles de conseguir", mientras que por parte del PNV, Pedro Azpiazu subrayó el cambio drástico del Gobierno en los últimos días en el análisis de la situación económica.
Joan Herrera de IU-ICV ratificó su negativa al objetivo de estabilidad presupuestaria por considerar que el discurso del Gobierno "no responde a la realidad" y desde ERC, Joan Ridao señaló que los datos macroeconómicos del Gobierno son "en exceso, conservadores y pusilánimes".
La diputada Olalla Fernández Dávila, del BNG, consideró necesario que el Ejecutivo establezca unos presupuestos que activen la economía y ayuden a los más perjudicados.
Rosa Díez, de UPyD, aseguró que el objetivo de estabilidad presupuestaria del Ejecutivo es una "enorme irresponsabilidad".
El diputado del PSOE, Francisco Fernández Marugán, admitió que la situación actual es "difícil y complicada", pero mostró su esperanza en encontrar una salida "razonable".
El límite de gasto de los Presupuestos Generales del Estado para 2009 será de 165.237 millones de euros, el 7,3 por ciento más que en 2008, cifra que se reduce a 160.158 millones tras efectuar los ajustes necesarios para pasar de contabilidad nacional a presupuestaria, lo que sitúa el aumento en el 5 por ciento, en línea con el crecimiento del PIB nominal previsto para 2009.
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