Los limpiadores tratan de mejorar la situación arrojando sal a las carreteras. Según las previsiones el peor momento del temporal está por llegar. Los atascos han dejado a miles de viajeros atrapados en sus vehículos. Algunos de los pasajeros que llevaban horas esperando en sus automóviles han muerto por las bajas temperaturas, entre ellos una madre y su bebé de un mes.