Iniciar sesión | Registrarse | ¿Por qué registrarse?
  • Podrás comentar las noticias con el nombre que elijas
  • Podrás subir tus noticias en soitu.es y guardarlas en tu propia página

Excusas para descubrir a Cortázar

Archivado en:
arte, libros
Por lamaga
Actualizado 11-03-2008 16:11 CET

Una exposición del fotógrafo Mario Muchnik nos descubre a un Cortázar muy vivo en sus últimos meses de vida.

Si algo nos enseñó Amelie fue que podía empezar a quererse a alguien tras mirar una simple fotografía de fotomatón. Pues bien, si lo que vemos es una instantánea realizada por el fotógrafo Mario Muchnik, la cosa se hace mucho más sencilla.

El hecho es que quien no conozca a Julio Cortázar la exposición del Centro de Arte Moderno de Madrid nos permite adentrarnos en una mínima parte del ingente universo de este escritor argentino.

Fue durante una estancia en Segovia cuando Muchnik fotografió al escritor en la última etapa de su vida. Aún así, el artista mantiene una fuerza y un porte que difícilmente pasan desapercibidos. Un rostro serio, casi hierático, poblado con una espesa barba, mira sin miedo a una cámara; aunque más que mirar a un aparato, este cronopio de fama mundial parece que se está enfrentando a un destino que sabe cercano, pero que afronta sin temor y con algo de soberbia e indiferencia. Unos meses más tarde, el 12 de febrero de 1984, moriría en París.

A pesar de la cercanía de la fecha –Cortázar celebraba su 69 cumpleaños, en agosto de 1983, en Segovia-, su cuerpo, delgado y desgarbado, es más el de un joven de 20 años que el de aun autor consagrado y uno de los principales responsables de la revolución de la literatura americana de los años 60.

Y si el sentido de la vista se hace insuficiente, bastará con cerrar los ojos y escuchar de los labios del autor de Rayuela algunos textos ya convertidos en clásicos como ‘Instrucciones para dar cuerda a un reloj’.

Una voz profunda y envolvente que nos hace estar seguros de que hay algo más allá, algo que se nos escapa y que no sabemos lo que es, pero que necesitamos perseguir sin descanso. Quizá se trate de eso mismo que buscó Cortázar en su vida y en sus obras. En definitiva, una desazón que una vez que se entra en el mundo de Cortázar uno ya no se puede quitar de encima de ninguna manera.

Pero esto ya es otra historia, etc.

Di lo que quieras

Aceptar

Si quieres firmar tus comentarios, regístrate o inicia sesión »

En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.

Nuestra selección

Hasta la vista y gracias

Soitu.es se despide 22 meses después de iniciar su andadura en la Red. Con tristeza pero con mucha gratitud a todos vosotros.

El suplicio (o no) de viajar en tren en EEUU

Fuimos a EEUU a probar su tren. Aquí están las conclusiones. Mal, mal...

Presidimos la UE: que no falten los regalos para los periodistas

Algunos países ven esta práctica más cerca del soborno.

Soitu.es vuelve a ganar el premio de la ONA

A la 'excelencia general' entre los medios grandes en lengua no inglesa.