CINE: 8 directores, 8 objetivos

Gael García Bernal acaba de terminar de rodar en Islandia el que será uno de los cortos que formarán "8". Todavía no hay fecha de estreno prevista para esta producción, que contará con varios de los mayores talentos tras la cámara, quienes aportarán su visión sobre la actualidad de los problemas de un mundo global.

"The Water Diary", dirigido por Jane Campion

8 directores: Abderramán Sissako, mauritano creador de películas como “Bamako”; Gael García Bernal, conocido actor y recién estrenado director en la película “Déficit”; Mira Nair, directora de cine indú conocida por películas como “El buen nombre” o “La boda del Monzón”; Gus Van Sant, (Last Days, Elephant); el francés Jan Kounen (Dobermann); Gapar Noe, director argentino de conocidas producciones como “Irreversible”; Jane Campion, directora de cine neozelandesa cuyo nombre recuerda a inolvidables largometrajes como “Retrato de una dama” o “El Piano” y Wim Wenders, guionista, actor y director de cine alemán con obras tan destacadas y variopintas como “Paris Texas” o “Cielo sobre Berlín”.

8 objetivos de desarrollo del Milenio, a conseguir para el 2015, plan convenido en el año 2000 por todas las naciones del mundo y todas las instituciones de desarrollo más importantes a nivel mundial: erradicar la pobreza extrema y el hambre, lograr la enseñanza primaria universal, promover la igualdad entre los géneros y la autonomía de la mujer, reducir la mortalidad infantil, mejorar la salud materna, combatir el SIDA, paludismo y otras enfermedades, garantizar la sostenibilidad del medio ambiente y fomentar una asociación mundial para el desarrollo. Cada uno de los directores tiene “carta blanca” para tratar uno de los 8 objetivos de la manera que quieran, ofreciendo un punto de vista personal, fuera de todo compromiso.

Los cortometrajes cada vez van ganando más espacio en festivales de cine, entre el público en general e incluso en las salas de cine comerciales. El corto no es sólo una plataforma de lanzamiento para directores noveles, sino que también, cada vez más, directores consagrados utilizan este formato para ofrecer su visión personal sobre un tema en cuestión, cuando tienen esa oportunidad. Y es que el cortometraje brinda a los cinematógrafos mayor libertad de creación, no existe una responsabilidad tan ceñida a los intereses como en un largometraje convencional. Suelen ser mucho más líricos y con más posibilidades artísticos, como vimos en “Paris Je t’aime”, donde también varios conocidos directores jugaban con sus conceptos del amor y de la ciudad de París.