Y parte de la culpa de que Coldplay se haya marchado a casa con las manos vacías la tiene la versión angelical de Amy Winehouse: Duffy. Su soul popero con influencias de los 60, su dulzura y su característica melena rubia han hecho de Duffy la gran triunfadora de esta edición de los Brit. Su single 'Mercy' estuvo cinco semanas en el número uno de las listas inglesas y su álbum 'Rockferry' ha vencido más de cinco millones de copias en todo el mundo. Méritos no le faltan. Duffy agradeció emocionada los premios y dijo: "Yo era de las que veía los Brits en casa con mis hermanas, esto es increíble". [Ver a Duffy en su actuación durante la gala]