La importancia del voto negro

Se acercan las elecciones de Estados Unidos, y ciértamente se presentan emocionantes. A pesar de que en Europa Obama sea el "candidato" con mayúsculas, los estadounidenses no tienen tan claro que Barack se vaya a convertir en el primer presidente negro. John McCain, un candidato que podría haberlo sido en los ochenta, no tiene tanta desventaja con respecto al senador por Illionis. ¿Quién se llevará el gato al agua? El voto negro parece que será decisivo en la elección del próximo inquilino de la Casa Blanca.

Obama, todavía por encima de McCain. La diferencia se va reduciendo en las encuestas; según unos están a 3 puntos. Según otros, a 9. En todo caso se reducen los 15 puntos de ventaja de Obama

John McCain no se rinde. Tiene todo en contra. Es mayor, es centrista en un partido conservador y tiene en frente al candidato más mediático desde Kennedy. Y a pesar de todo, el veterano del Vietnam no lo tiene tan "negro". Según distintas encuestas publicadas por el Washington Post, el New York Times y CBS News, la diferencia en la intención de voto no es un abismo, sino una estrecha franja de entre 9 y 6 puntos. Hay otros que los sitúan sólo a 3. Y lo que es más significativo: hace un par de semanas, la distancia era de 15 puntos.

¿Dónde tiene su fortaleza Barack Obama? Parece una obviedad, pero en el voto negro, no hay color. El sondeo de "The New York Times" indica que el 89 por ciento de los negros votarán a Obama y sólo un 2 por ciento a McCain. Entre los hispanos la diferencia no es otro "abismo de Helm": el 62 por ciento vota al demócrata y el 23 por ciento al candidato republicano. El porcentaje de afroamericanos que piensan votar a Obama alcanza el 94 por ciento en el sondeo de "The Washington Post". De ahí la importancia del voto negro en estas elecciones.

Porque entre los blancos, la cosa está mucho más igualada. McCain supera a Obama con un 50-42, lo que en el cómputo global hace que el demócrata no tenga tanta ventaja sobre el republicano. De hecho, esa ventaja se podría convertir, como hemos dicho más arriba, en un empate técnico. Al menos así lo reflejan otras encuestas.

Según Newsweek, que hace un mes otorgaba a Obama una ventaja de 15 puntos porcentuales, indicaba este fin de semana que esa distancia se ha reducido a sólo tres puntos. Teniendo en cuenta el margen de error del sondeo, esta diferencia se convierte en un empate técnico. Y echando un vistazo al sistema de delegados que tienen en Estados Unidos, un nuevo triunfo republicano no sería nada extraño.

Estos resultados del semanario "Newsweek" coinciden con los ofrecidos por otro sondeo elaborado por la empresa Rasmussen, que da un empate a 43. Unos números que sorprenden, teniendo en cuenta que hace menos de un mes, Obama contaba con mayoría absoluta, el 51 por ciento y John McCain, sólo el 36 por ciento.

¿DESPIERTA OBAMA RECELOS?
¿Cuál puede ser la razón de este cambio? Quizás pueda deberse a que Obama es un candidato mucho más mediático que McCain, y eso se le podría haber vuelto en su contra. Si bien éste es más desconocido, tampoco levanta pasiones.

Según la encuesta de Rasmussen, McCain recibe una buena calificación del 32 por ciento de los demócratas, mientras que el senador afroamericano solamente obtiene el apoyo del 23 por ciento de los republicanos. En el caso de McCain, el 17 por ciento de los encuestados ve con muy buenos ojos al senador por Arizona y el 17 por ciento tiene una mala opinión de él; mientras que el 30 por ciento de los votantes tienen una opinión muy favorable de Obama, mientras que el 26 por ciento afirma lo contrario. Es decir, hay más gente que rechaza a Obama que a McCain...

Y es que Obama levanta pasiones, pero también recelos. McCain en cambio sigue la estrategia, -tan añorada en España por algunos asesores de Rajoy como Pedro Arriola-, de no levantar odios e intentar pasar un "poco más desapercibios". Obama sigue la estela de candidatos que no dejan indiferente a nadie, y eso puede pasarle factura.

Lo que está claro es que de aquí a las elecciones aun queda mucho partido por jugar. Aun está por ver quiénes formarán el ticket electoral con ambos candidatos. Ya se habla de que Mitt Romney acompañará a McCain; quieren una candidatura más conservadora, debido al perfil centrista del candidato, y Romney puede ser quien dé ese marchamo de "pedigrí" senador por Arizona. De quién será el número 2 de Obama se ha escrito mucho. Y aunque suena con fuerza en nombre de Hillary Clinton, aun no hay nada decidido.

Ciertamente un "duet" Obama-Hillary sería, mediáticamente, insuperable. No tendrían nada que hacer un ticket formado por McCain-Romney. Pero de ahí a que la conservadora sociedad de la América profunda le otorgue el triunfo, todavía hay un trecho. La emoción crece, y veremos quién gana finalmente las elecciones americanas más seguidas en Europa desde hace décadas.