Nole ya es maestro

Djokovic ya es maestro. Y Davydenko –aunque parezca mentira- sabe sonreir. Se acabó la temporada de tenis, a falta de la final de Copa Davis de la próxima semana. La Master Cup nos deja un nuevo maestro –el número tres del mundo- en un torneo disminuido y que reabre el debate sobre el calendario.

Djokovic emocionado besa la moqueta

Nole ganó un partido que pronto se le puso de cara: 6-1 en el primer set, con un parcial de 5-0. Desde que cambio al formato de final a tres sets, las remontadas se presentan imposibles. Davydenko optó casi siempre por la decisión equivocada y eso se reflejó con claridad en el marcador.

El serbio, sin embargo, pareció recuperado de los partidos intensos y de enorme desgaste que tuvo que solventar.

El segundo set transcurría por las mismas vías. Djokovic consiguió una temprana ruptura de servicio y se puso 3-1 en el marcador. Davydenko seguía con un juego errático, plagado de errores no forzados, motivados casi siempre por dar el golpe que no tocaba con la fuerza que no correspondía.

Así las cosas, el serbio con 5-3 dispuso de dos bolas de partido. Y ese fue el momento que eligió el ruso para jugar su mejor tenis. La igualdad la consiguió con un golpe espectacular que, por fin, le dibujó una sonrisa en la cara. Sí, Davydenko ¡sabe sonreír!

Así que Djokovic tenía que ganar el partido con su servicio, pero el ruso mantuvo alto el nivel y enseguida se puso 0-30. Ese fue el momento en el que Nole decidió dejar constancia de ese temperamento explosivo e inmaduro del que hace gala en las ocasiones más inapropiadas.

Totalmente desconcentrado, entregó el juego con una doble falta, tras hacer un gesto de reproche hacia la grada.

Pero ahí se acabaron los argumentos del ruso, quien perdió su juego a continuación, proporcionando a Djokovic de nuevo la posibilidad de victoria con su servicio, que esta vez no desaprovechó.

Tan contento estaba el serbio que empezó a lanzar a la grada todo lo que llevaba encima: muñequeras, camiseta y raquetas ante el delirio de sus seguidores.

Nole ya es maestro, y se lo merece.

La Copa Master, sin embargo, ha puesto de nuevo en evidencia un calendario del que se quejan los tenistas. Un torneo que no ha contado con la participación del nº 1; el nº 4, Roddick, se retiró y tuvo que ser sustituido por Stpanek, cuyo puesto en el ranking es el 27. Es decir, entre el 10 (Blake, que también renunció a viajar a China) y el 26 no encontraron a nadie dispuesto a jugar en Shangai.

Se entiende que españoles y argentinos declinaran la invitación para preparar la final de la Davis, pero, ¿y el resto de tenistas?

En poco más de un mes volverá la competición con nada menos que tres torneos: Adelaida, Doha y Chennai. Veremos como se presenta la temporada, si Nadal se ha recuperado, junto con el resto de jugadores tocados: Federer, Roddick, Blake …

Una temporada que será realmente la prueba de juego para Nadal. Son muchos puntos los que defiende, pero también tiene dos retos importantísimos: mejorar su palmarés con los dos grandes que todavía no tiene en su vitrina, Melbourne y Nueva York.