El 13-M y las intenciones de TVE

Algunos estarán redactando un recurso ante el Tribunal Constitucional para que paralice inmediatamente la final de la Copa del Rey. Aunque sucede que desde la calle Génova andan escasos de tinta de impresora porque no dan abasto con tanto escrito. Y tampoco se fían entre ellos. Creerán fielmente que "España se rompe" si el F.C. Barcelona y el Athletic de Bilbao disputan el partido del próximo miércoles.  ¿Por qué?

TVE dejó paso a las cadenas privadas. Las cuentas no cuadraban y tuvo que desmprenderse de los partidos de la Champions, de la Liga, del automovilismo... deportes de excelente éxito y por tanto de gran interés general. Algunos directivos de la cadena pública decidieron que era mucho más importante pagar a Ortega Cano y a Julio Salinas cifras astronómicas por ver cómo bailaban; otros han pagado a Melody o Soraya para llevarlos a Eurovisión. Todo ello con tu dinero, con mis impuestos.

Y la gota que ha derramado el vaso ha sido la final de la Copa del Rey. Espero que hagan públicas las cuentas porque sé que han tenido que pagar una millonada de euros a Telecinco, que es quien viene retransmitiendo dicha competición en los últimos tiempos. Telecinco ha apostado en los últimos años por este evento y por ello ha debido venderla cara a TVE. ¿Por qué TVE ha pagado tanto por un simple partido de fútbol y por una competición que no ha estado siguiendo? - porque es mucho más.

La Casa Real ha empezado sus movimientos. Su Majestad, el Rey Juan Carlos, anduvo con la bufanda del Sevilla (también pagada por ti y por mí) y con la del Mallorca deseando su victoria con más fervor que nunca. Y es que la final prevista para el 13 de mayo se le antoja como histórica. El Rey deberá asumir un papelón cuando, en el terreno de juego, salten dos equipos como el Athletic y el Barca. Dos clubes que representan una realidad lo menos nacional posible. ¿Qué hará Joan Laporta en el palco? ¿Le dará a Su Majestad, como ha hecho otras veces en su feudo, papeletas bajo el lema 'CATALUNYA IS NOT SPAIN'? 

Éso en cuanto al terreno de juego, donde los jugadores se comportarán de una manera profesional. No tengo dudas. ¿Y en las gradas? El Rey asistirá a la Copa del Rey menos nacional de la historia. Habrá senyeras por todas partes e ikurriñas por doquier. Cuando suene el himno de España los aficionados de ambos equipos silvarán con todas sus fuerzas. Y ante dichas imágenes y dichos sonidos, contar con un equipo de realización amigo, es contar mucho. Por eso TVE se ha hecho con los derechos de retransmisión. Para 'silenciar' la orquesta de viento y para 'disimular' las banderas territoriales.

En otros tiempos esto se llamó censura. Si la parte constitucional está haciendo sus primeros movimientos estratégicos, los seguidores del Athletic y del Barca (cuando no los propios clubes) estarán trabajando por la parte que les toca. Las excelentes relaciones entre ambas Comunidades y entre ambos equipos (se llaman todos los día para jugar partidos entre la Selección de Euskadi y la Selección de Catalunya) harán que preparen este partido con mucho más que una Copa en juego. Será su gran oportunidad de hacer el máximo ruido posible en las portadas y en los telediarios. Será una reivindicación perfecta de lo que ellos entienden que es la realidad de la nación. Será un partido que pase a la historia. 

Si yo fuera el Rey cogería del brazo al presidente del F.C. Barcelona y le diría algo como: "¿qué tal, JUAN?". Ahora es el momento de que unos y otros se muestren como son y se dejen de disimulos. Sin duda, el partido de Mestalla será más que un partido. Y como eso lo sabía nuestra televisión pública, ha comprado los derechos a cualquier precio. Se masca la tragedia: estoy ansioso de saber cómo reaccionarán los técnicos cuando suene el himno antes del partido. ¿Nos sorprenderán?