La ONU advierte que varios países latinoamericanos se quedan atrás en la lucha contra la pobreza

Santiago de Chile.-  El secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, manifestó hoy que la región de América Latina y el Caribe alcanzará el objetivo de reducción de la pobreza a más tardar en 2015, pero alertó también de que "varios países se están quedando atrás".

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(EFE)

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, pronuncia un discurso durante la mesa redonda sobre "la Alianza Mundial para el Desarrollo", antes de la inauguración oficial de la Cumbre Iberoamericana.

Ban Ki-moon, acompañado del presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, y de la presienta de Chile, Michelle Bachelet participó en una conferencia organizada en la Comisión Económica de Naciones Unidas para América Latina y el Caribe (CEPAL) antes de iniciar mañana un viaje a la Antártida, invitado por el Gobierno chileno.

Según apuntó, las nuevas estimaciones de la CEPAL dicen que la proporción de habitantes de la región que vive en situación de pobreza extrema ha descendido del 19 por ciento de finales de los noventa al 13,5 por ciento del año pasado.

Sin embargo, en América Latina y el Caribe sigue habiendo casi 200 millones de personas que viven en la pobreza, de las que 70 millones padecen pobreza extrema y 50 millones sufren desnutrición, cifras que calificó de "demasiado altas".

Al mismo tiempo, añadió, ha disminuido la proporción de ayuda oficial al desarrollo que recibe la región.

Aunque ese descenso se debe en gran medida a la existencia de muchos países de renta media, Ban Ki-moon pidió a la comunidad internacional que no olvide que esos países también necesitan apoyo y elogió el "encomiable" esfuerzo de España al duplicar su ayuda oficial al desarrollo desde 2004.

El secretario general de Naciones Unidas reclamó una respuesta para la "emergencia" mundial que supone que casi mil millones de personas viven con menos de un dólar diario, y recordó que la fecha de 2015 para alcanzar los Objetivos del Milenio es "inamovible", por lo que es necesario redoblar los esfuerzos.

En ese contexto, consideró esencial la reforma de la política relativa al comercio mundial y reclamó que la ronda de negociaciones comerciales de Doha concluya con medidas de desarrollo, como la "ayuda al comercio".

No olvidó tampoco el reto del cambio climático y confió en que su próximo viaje a la Antártida y Punta Arenas, en la Patagonia chilena, sirva para concienciar a los líderes mundiales de la necesidad de concertar esfuerzos.

La presidenta de Chile coincidió con el discurso de Ban Ki-moon al recordar el impacto del cambio climático en la perspectivas de desarrollo de las zonas más pobres del planeta.

Bachelet manifestó también su preocupación por la situación de los Objetivos del Milenio, pero al mismo tiempo se mostró optimista y reclamó esfuerzos de cooperación "de gran escala" y que los compromisos contraídos se materialicen en acciones concretas.

En ese contexto, consideró que sería "imperdonable" que no se logre un acuerdo en la ronda de Doha para lograr unas reglas comerciales más libres y justas.