El PSOE ultima la presencia de ministros en lugares estratégicos ante las elecciones de marzo

Madrid.-  El PSOE está ultimando la presencia de los ministros en sus candidaturas para las próximas elecciones generales intentando aprovechar su tirón en algunos lugares considerados estratégicos para mantener o superar el resultado de los comicios de 2004.

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(EFE)

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a su llegada al pleno del Senado.

El único "primer puesto" confirmado es el del propio presidente y candidato a la reelección, José Luis Rodríguez Zapatero, que encabezará la lista por Madrid y que podría tener tras él, en puestos de salida de esta candidatura, a otros ministros, como ocurrió en los pasados comicios con Cristina Narbona o Mercedes Cabrera, quien fue su "número dos".

Ninguno de sus ministros confirma oficialmente si encabezará las candidaturas -según los estatutos del PSOE, las listas no se ratificarán hasta el Comité Federal que se celebrará el 12 de enero- aunque, por el momento, dejan "caer" su "ilusión" o su "intención de acatar lo que pida el partido".

Uno de los primeros miembros del Gobierno en oficializar su "disposición" a encabezar una lista fue la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, que el mes pasado aseguró que le haría "mucha ilusión" presentarse como número uno por Valencia.

El PSOE hizo este anuncio justo la misma semana en la que Joan Ignasi Pla dimitió (el 18 de octubre) como secretario general del PSPV-PSOE tras unas informaciones que apuntaban que recibió trato de favor de una constructora en la reforma de su casa, tras lo cual se nombró una comisión gestora que se hará cargo del partido hasta el Congreso Ordinario de 2008.

De esta forma, las tres provincias de la Comunidad Valenciana confirmaban a su cabeza de lista, ya que el ministro de Sanidad, Bernat Soria, irá de número uno por Alicante, y el ex ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, por Castellón.

Uno de los ministros más "solicitados" por las federaciones regionales para encabezar sus listas es el del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, al que los socialistas andaluces sitúan en la de Cádiz.

Rubalcaba sería el candidato idóneo para llenar el hueco dejado por Alfonso Perales, fallecido el pasado mes de diciembre, quien fue cabeza de lista en las generales por Cádiz durante cinco legislaturas.

La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, repetirá por Málaga, como así lo han dado por seguro esta semana fuentes del PSOE en esta provincia.

Mientras, el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, ha sido tentado por Murcia -pese a no tener vinculación con la región- y, a falta de la ratificación, tanto los socialistas murcianos como él mismo han mostrado su voluntad de que sea así.

Dos ministros podrían ser cabeza de lista en Galicia: la titular de Agricultura, Elena Espinosa, que repetiría por Orense, y el de Cultura, César Antonio Molina, que se estrenaría como candidato a unas elecciones y lo haría por A Coruña.

La titular de Vivienda, Carme Chacón, recurrió al "me haría mucha ilusión" para insinuar, la semana pasada, que podría encabezar la lista del PSC por Barcelona, candidatura que en 2004 lideró el actual presidente de la Generalitat, José Montilla. A la espera de esa confirmación se encuentra Joan Clos para saber su destino en las listas.

No es tan fácil ubicar, sin embargo, al vicepresidente segundo, Pedro Solbes, quien, de hecho, esta misma semana aseguraba que aún no ha decidido si continuará como titular de la cartera económica del Gobierno si el PSOE repite victoria en las urnas.

Fuentes del partido señalaron, no obstante, que aunque Solbes repita como vicepresidente económico, quizá no se presente candidato a las elecciones -no lo hizo en 2004, y Zapatero contó con él para su Gobierno-.

Tampoco está claro por qué lista concurrirá la ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, quien, en una entrevista con Efe, asegura que ha recibido varias propuestas para formar parte de alguna candidatura del partido y se ha mostrado dispuesta a ello si así lo considera conveniente el partido.