El estado chileno debe cubrir el coste del rescate de los náufragos del "Explorer"

Santiago de Chile.-  El coste del rescate de los 154 náufragos del crucero Explorer, que se hundió el pasado viernes tras chocar con un iceberg en la Antártica, deberá ser financiado por el Estado de Chile, aseguró hoy una fuente de la Marina.

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(EFE)

Fotografía cedida por la Fuerza Aérea de Chile de la tripulación y pasajeros del crucero Explorer, a su llegada ayer a Puerto de Bahía Fildes, tras el hundimiento de la nave en el océano Antártico debido al choque contra un iceberg.

Ello, en virtud de dos acuerdos internacionales de los que el país es parte, precisó el capitán Felipe Gracia, de la Dirección de Seguridad Marítima, organismo encargado de las operaciones de búsqueda y salvamento en este país.

Se trata del Convenio para la Seguridad de la vida humana en el mar, del que Chile es parte desde 1974 y del Convenio de Búsqueda y Salvamento, suscrito por el Estado chileno en 1979, explicó en declaraciones al vespertino La Segunda.

Agregó que el coste de la operación en la Antártica aún no ha sido calculado, pero que la Marina dispone de una partida presupuestaria para eventualidades como esa, según lo dispone la ley de navegación.

Explicó además que cuando se trata de salvar bienes materiales, la Marina "podría cobrar", pero cuando se trata de vidas humanas existen las obligaciones contenidas en los convenios señalados.

Las tareas de resguardar la vida humana incluyen hasta un plan de protección que opera cada verano en playas y balnearios.

En cuanto al gasto que supone la tarea de neutralizar la contaminación provocada por el naufragio del Explorer, Gracia indicó que será cubierto por los seguros contratados por los propietarios del barco.

El crucero, de bandera liberiana, yace a 1.100 metros de profundidad en el estrecho Bransfield, a unos 76 kilómetros al este de la isla Rey Jorge, en la Antártica, donde se hundió el pasado viernes.

Tras pasar cuatro horas en los botes salvavidas, los 154 ocupantes de la nave fueron rescatados por el crucero noruego Nord Norge, que los dejó en bases chilenas y uruguayas de la isla rey Jorge (25 de Mayo).