Giuliani negó el uso fondos de públicos en vacaciones cuando era alcalde de Nueva York

Nueva York.-  El aspirante a la candidatura republicana a la Casa Blanca Rudolph Giuliani negó hoy que usara fondos públicos para pagarse unas vacaciones junto a su novia cuando fue alcalde de Nueva York entre 1999 y 2001.

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(EFE)

Rudolph Giuliani (en la imagen), rechazó unas acusaciones de las que se hace amplio eco hoy la prensa neoyorquina.

Giuliani, que se encuentra en plena campaña electoral, rechazó unas acusaciones de las que se hace amplio eco hoy la prensa neoyorquina, que cuenta con todo tipo de detalles en qué y con quién el alcalde de Nueva York habría gastado supuestamente dinero del erario público.

"Para empezar no es cierto", dijo Giuliani, quien el miércoles protagonizó un enfrentamiento político con el ex gobernador de Massachusetts Mitt Romney durante el debate que los ocho aspirantes republicanos a la presidencia de Estados Unidos celebraron en Saint Petersburg (Florida).

Según la prensa neoyorquina, los gastos de seguridad de Giuliani en sus vacaciones de aquella época, cuando tenía una aventura extramarital con Judith Nathan, habrían corrido a cargo de la alcaldía y el entonces regidor lo habría ocultado en los gastos de otros organismos municipales.

Entre 1999 y 2002 Giuliani estaba casado con Donna Hanover y tenía una conocida relación con Judith Nathan, que entonces poseía un apartamento en Southampton, muy cerca de Nueva York y una localidad, según la prensa estadounidense, muy visitada por el entonces alcalde.

El ex alcalde de la Gran Manzana pasó durante los veranos de esos años al erario público facturas correspondientes a gasolina y hoteles en Southampton, según el sitio de internet Politico.com, que dice haber obtenido los datos en base a la ley de libertad de información del estado de Nueva York.

Giuliani explicó que todo lo relativo a su seguridad de su época de alcalde está en el historial de las fuerzas de seguridad, pero no entró a detallar por qué motivo parte de esos gastos, que ascienden a varias decenas de miles de dólares, se presentaron como facturas de diversos organismos municipales.

Su principal asesor electoral, Tony Carbonetti, salió en su defensa al señalar que todos esos gastos eran legales y alegar que "cuando haces lo que haces, la policía va contigo. Eso es así cuando se es alcalde de Nueva York".

"No hemos hecho nada para ocultar o maquillar algo", dijo Carbonetti al diario "Newsday".

Sin embargo, las informaciones sobre los gastos pueden dañar la campaña electoral de Giuliani, que esta semana ha visto cómo una cuidadora de niños de un centro de asistencia pública le ha exigido que no utilizara su imagen en sus anuncios de televisión.

Esta polémica también podría reabrir, según expertos, las críticas hacia Giuliani y recordar a los votantes su agitada y pública vida sentimental, que incluye tres matrimonios y dos divorcios, y sus infidelidades maritales.

La actuación de Giuliani durante los días posteriores a los ataques del 11 de septiembre de 2001 contra las Torres Gemelas en Nueva York le reconciliaron con muchos neoyorquinos, descontentos hasta entonces por la mano dura con la que gestionaba la ciudad, y a nivel nacional le dieron la imagen de un político de confianza.