El gobierno boliviano insta a la oposición a aceptar el diálogo antes de que "fracasen" las protestas

La Paz.-  El gobierno boliviano exhortó hoy a la oposición a aceptar el diálogo antes de que "fracasen" sus medidas de protesta, como una huelga de hambre que se iniciará este lunes con el propósito de ser "nacional e indefinida".

ampliar foto

(EFE)

Esta medida de presión fue convocada por los dirigentes de Santa Cruz el jueves pasado al término de un paro general seguido también en los departamentos de Beni, Pando, Cochabamba, Tarija y Chuquisaca.

Al ayuno se suman los llamados a la desobediencia civil y el viaje a Estados Unidos, este lunes, de varios prefectos (gobernadores) opositores para presentar denuncias contra el presidente Evo Morales ante Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos.

El gobierno restó hoy importancia a las protestas de la oposición en relación con la nueva Constitución del país, que debe ser aprobada en todas las instancias en un plazo de 12 días, según ha establecido el Congreso.

El portavoz gubernamental, Alex Contreras, sostuvo hoy, en declaraciones a la radio estatal Patria Nueva, que todas las medidas de protesta "irán camino al fracaso" porque, a su juicio, la oposición no tiene respaldo social.

Contreras reiteró la invitación a una reunión este martes con todos los prefectos, seis de los cuales son opositores a Morales, pero la agenda de temas propuesta por el Ejecutivo es diferente a la exigida por la oposición.

"Antes que fracasen estas medidas de presión, antes que fracasen en su intento desestabilizador y antidemocrático les estamos invitando a un diálogo", remarcó Contreras.

Una fuente del Comité Cívico de la región de Santa Cruz dijo hoy a Efe que mañana, lunes, el directorio de la entidad, encabezado por el empresario opositor Branco Marinkovic, decidirá qué sectores iniciarán de inmediato la huelga de hambre.

Esta medida de presión fue convocada por los dirigentes de Santa Cruz el jueves pasado al término de un paro general seguido también en los departamentos de Beni, Pando, Cochabamba, Tarija y Chuquisaca.

Las autoridades de esos seis departamentos acusan al gobierno de Morales y su partido, el Movimiento Al Socialismo (MAS), de actuar "ilegalmente" y "degollar" la democracia.

El MAS y sus aliados aprobaron la semana pasada, en primera instancia, la nueva Carta Magna en un recinto militar, sin opositores y, según la prensa local, violando el reglamento de la propia Constituyente.

La oposición también ha denunciado que los partidarios de Morales obstaculizaron el acceso al Congreso de sus representantes cuando el pasado viernes se votaban dos leyes rechazadas por los opositores.

Las leyes, una que recorta el presupuesto de las regiones para pagar un bono de vejez y otra para cambiar la sede de la Asamblea, fueron aprobadas sin la presencia de muchos legisladores opositores, que no pudieron burlar un cerco campesino instalado en las puertas del Parlamento.

Pese a que Morales insiste en el diálogo y la oposición pidió tregua, ambas partes no han parado los ataques mutuos en un clima de creciente violencia que en las pasadas horas produjo enfrentamientos con diez heridos en la ciudad norteña de Cobija, fronteriza con Brasil.

Lo peor de la violencia se produjo en Sucre la semana pasada donde tres civiles murieron y más de 300 quedaron heridos, cuando el oficialismo y sus aliados aprobaron la nueva Constitución con el voto de 136 de los 255 constituyentes electos en julio de 2006.

El presidente Morales dijo el sábado que no se "rendirá" a la presión de los "grupos oligárquicos", que ellos no lo asustan y que en realidad buscan trabar el proceso de cambio iniciado por su gobierno hace 22 meses.

El enfrentamiento entre oficialistas y opositores amenaza con agravarse aún más a falta de doce días para que venza el plazo legal establecido por el Congreso para que la Asamblea Constituyente apruebe definitivamente el nuevo texto constitucional.

El plazo vence el 14 de diciembre.

La directiva de la Asamblea se encuentra trabajando en La Paz mientras se decide el lugar definitivo de la instalación de las sesiones, que ya no volverán a celebrare en Sucre.

Según publica hoy el diario La Razón, el partido de Morales ha definido que el texto constitucional final sea aprobado por la Asamblea en una sola sesión, posiblemente el mismo 14 de diciembre.