Cuba enfrenta la escasez de maestros como una amenaza a la revolución

La Habana.-  Cuba enfrenta el problema de escasez de maestros derivada de la pérdida de estudiantes de magisterio, la deserción profesional y la jubilación de los profesores más experimentados como una amenaza a la propia revolución, informa hoy la prensa local.

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(EFE)

"Si no hay educación, no hay revolución", indicó el primer secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), Julio Martínez.

"Si no hay educación, no hay revolución", indicó el primer secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), Julio Martínez, en declaraciones realizadas en una reunión de balance de esa organización en la provincia de Matanzas, aledaña a La Habana, que hoy publica el diario oficial "Juventud Rebelde".

El rotativo señala que "cada vez se captan menos estudiantes para las carreras pedagógicas y se jubilan los más experimentados profesores por el proceso lógico de la vida".

Como ejemplo, pone la situación de Matanzas, donde el Instituto Superior Pedagógico Juan Marinello "ha encendido su alarma una vez más", ya que, pese a tener capacidad para albergar a 1.000 estudiantes, el número de matriculados apenas llega a 127.

En esta provincia, el déficit de maestros "se ha convertido en un largometraje filmado en varias partes en los últimos lustros" y es una "vieja historia, agudizada, pero vieja al fin", señala la fuente.

En la reunión se informó de casos de jóvenes preuniversitarios que optan por las carreras pedagógicas para "pasar sólo 14 meses en el Servicio Militar General -en lugar de los dos años establecidos-, pues luego no se incorporan a las aulas, lo que representa un grave engaño a la revolución".

Entre las causas de esta "vieja historia", se señaló como "factor decisivo" que los padres, "por un lado, se quejan cuando faltan los maestros y exigen buenos profesores para sus hijos, mientras por otro desaniman y presionan a sus hijos para que nunca estudien carreras pedagógicas".

Las autoridades han admitido que el sistema educativo de la isla, una de las banderas de la revolución, arrastra problemas de capacitación en el 50 por ciento de los profesores y hay un "éxodo" de profesionales por las bajas remuneraciones.

A finales de octubre, el ministro de Educación, Luis Ignacio Gómez, reconoció el éxodo de profesores causado por "la insuficiente remuneración, no acorde con la intensidad y la responsabilidad del trabajo asumido por los maestros".

Agregó que en la deserción de los profesores también pesan limitaciones relacionadas con la vivienda, el transporte y el vestuario, así como "la insatisfacción por el bajo reconocimiento laboral y social en no pocos casos".

En los últimos meses, los medios oficiales cubanos han hecho hincapié en las deficiencias del sistema educativo derivadas de programas como el de los maestros emergentes, jóvenes estudiantes que trabajan como profesores de enseñanza primaria y secundaria mientras completan su propia formación.