El alcalde de Muxía dice que la deuda con los voluntarios es impagable

Santiago de Compostela.-  El alcalde de Muxía, Félix Porto, aseguró a Efe que la deuda con los voluntarios que ayudaron en las tareas de limpieza del fuel del Prestige "es impagable" y que lo mínimo que puede hacer su ayuntamiento es "el reconocimiento público de su labor".

ampliar foto

(EFE)

Imagen de un operario de la empresa Tragsa en la costa de Muxía, en 2004.

Este fin de semana Muxía celebra un homenaje a los voluntarios en el que habrá mesas redondas, exposiciones, cenas y un concierto de música para reconocer "la labor fundamental" desarrollada por estas personas en beneficio de la localidad.

Porto, en una entrevista a Efe, reconoció que actualmente "se ha vuelto al nivel de antes, sobre todo en el espíritu de convivencia" y, en lo que al medio se refiere, "la recuperación es casi de un 95 por ciento".

Desde el Ayuntamiento intentaron localizar a las personas que estuvieron en la localidad como voluntarios para invitarles al homenaje, pero el alcalde reconoció que "muchas nos las devolvían por cambio de domicilio u otras razones".

No se puede cuantificar cuantas personas asistirán a la cita de los días 7 y 8 de diciembre, pero el regidor municipal hizo extensible la invitación "a todos aquellos que les haya llegado o no la invitación", y aprovechó para pedirle disculpas a los que no les ha llegado.

Félix Porto, preguntado por cómo vivió aquellos días, respondió que lo que más recuerda es "la doble sensación", de indignación, por un lado, al ver lo que estaba ocurriendo y, por otro, "la inmensa gratitud" hacia los voluntarios, "que ayudaron a sobrellevar catástrofe y consiguieron que la repercusión fuese menor de lo que pensábamos", dijo.