El Papa denuncia que obstaculizar la familia y destruir el ambiente amenazan la paz

Ciudad del Vaticano.-  El Papa Benedicto XVI quiso denunciar en su mensaje para la Jornada Mundial de la Paz, que la Iglesia católica celebra cada 1 de enero, que quien obstaculiza la institución familiar y destruye el medioambiente amenaza la paz en el mundo.

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(EFE)

El Papa Benedicto XVI quiso denunciar en su mensaje para la Jornada Mundial de la Paz, que la Iglesia católica celebra cada 1 de enero, que quien obstaculiza la institución familiar y destruye el medioambiente amenaza la paz en el mundo.

"Quien obstaculiza la institución familiar, aunque sea inconscientemente, hace que la paz de toda la comunidad, nacional e internacional, sea frágil", explicó Benedicto XVI en su mensaje, adelantado hoy por el Vaticano.

El Papa explicó que "todo lo que contribuye a debilitar la familia -la fundada en el matrimonio de un hombre y una mujer- lo que directa o indirectamente dificulta su disponibilidad para la acogida responsable de una nueva vida, lo que se opone a su derecho de ser la primera responsable de la educación de sus hijos, es un impedimento objetivo para el camino de la paz".

Benedicto XVI basa estas afirmaciones al señalar que "la familia es la primera e insustituible educadora de paz" porque "permite tener experiencias determinantes de paz" ya desde el nacimiento, "como los gestos y miradas de mamá y papá".

Y señaló, que por ello "es particularmente intolerable la violencia cometida en familia".

Pero el Pontífice también hizo hincapié en la importancia de la tutela del medioambiente para conservar la paz.

"Hemos de cuidar el medio ambiente: éste ha sido confiado al hombre para que lo cuide y lo cultive con libertad responsable, teniendo siempre como criterio base el bien de todos", agregó.

Entonces, instó a los "expertos y entendidos" a que "sin apremios ideológicos hacia conclusiones apresuradas" concuerden juntos "un modelo de desarrollo sostenible".

Y pidió a las Naciones "mayores esfuerzos" para la "intensificación del dialogo para la adecuada gestión de los recursos energéticos del planeta".

Para el Papa es necesario que "los países más desarrollados "revisen los elevados niveles de consumo" y que "dispongan las inversiones adecuadas para diversificar las fuentes de energía y mejorar la eficiencia energética".

EL Pontífice resaltó que los países más pobres, "por la insuficiencia de sus infraestructuras y tecnologías, se ven obligados a malvender los recursos energéticos que tienen".

Por otra parte, Benedicto XVI señaló la importancia de las condiciones económicas para que reine la paz en la familia.

"Se tiene una auténtica experiencia de paz en la familia cuando a nadie le falta lo necesario y el patrimonio familiar -fruto del trabajo de unos, del ahorro de otros y de la colaboración activa de todos- se administra correctamente con solidaridad, sin excesos ni despilfarro", escribe en el mensaje.

Sobre este aspecto, el Pontífice puntualizó que "las ayudas que se dan a los países pobres han de responder a criterios de una sana lógica económica".

Y exhortó a "evitar derroches" como el de los "costosos aparatos burocráticos" que se ocupan de distribuir estas ayudas.

En el mensaje, que el Papa resumirá a los fieles católicos durante la celebración en el día de Año Nuevo, el Papa también mostró su preocupación por "las grandes divisiones y fuertes conflictos que arrojan densas nubes sobre el futuro de la humanidad".

El Papa destacó "la fundada preocupación que suscita en toda persona responsable de que aumenten las tensiones en países con armas nucleares".

En el texto se expresa la denuncia ante "el aumento del número de Estados implicados en la carrera de armamentos" y se denuncia cómo "Naciones en vías de desarrollo destinan una parte importante de su escaso producto interior para comprar armas".

Ante ello, el Papa explicó que "en un momento en el que proceso de no proliferación nuclear está estancado", ha considerado necesario exhortar a las autoridades de los países a "que reanuden con determinación más firme las negociaciones de cara al desmantelamiento progresivo y concordado de las armas nucleares existentes".