Un jesuita cataloga en ocho volúmenes el patrimonio musical de la catedral de Valladolid

Valladolid.-  El sacerdote jesuita José López-Calo, catedrático emérito de la Universidad de Santiago de Compostela, ha catalogado en una obra de ocho volúmenes presentada hoy el vasto patrimonio musical de la Universidad de Valladolid, unas 10.000 composiciones fechadas entre la Edad Media y el siglo XX.

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(EFE)

El sacerdote José López-Calo (c), junto a la concejala de Educación del Ayuntamiento de Valladolid, María Ángeles Porres, y el director de la Obra Social de Caja España, Galo Senovilla, durante la presentación de los ocho volúmenes de la obra "La música en la Catedral de Valladolid", en los que ha catalogado, sistematizado y analizado el patrimonio musical de la seo vallisoletana, con cerca de 10.000 composiciones desde la Edad Media.

La magna empresa, editada por el Ayuntamiento de Valladolid y la entidad financiera Caja España, es fruto de casi 35 años de investigación continuada por parte de ese jesuita y musicólogo, autor de estudios similares en los templos mayores de Ávila, Burgos, Calahorra, Granada, palencia, Plasencia, Santiago, Segovia y Zamora.

La de Valladolid ha sido "una obra compleja, extensa y difícil", ha dicho López-Calo durante la presentación de un estudio que ha perfilado durante los cinco últimos años y que ha requerido de "un gran esfuerzo técnico, económico y de coordinación", ha dicho por su parte la concejala de Educación, Ángeles Porres.

Más de 4.000 páginas compendian el ingente patrimonio musical de la seo vallisoletana dentro de una novedad editorial que también incluye el catálogo de los 945 libros encuadernados existentes en el templo y que ya editó en 1948 monseñor Anglés, maestro de López-Calo.

La obra recorre de forma minuciosa el archivo musical de la catedral de Valladolid, que conserva ejemplares únicos de los grandes autores alemanes, italianos, flamencos y franceses del siglo XVI, y su abundancia de originales permite analizar el tránsito de la música religiosa desde el siglo XVI hasta el XVIII, además de disponer de uno de los fondos mejores dotados del barroco español.

Así lo ha afirmado el sacerdote, quien también ha participado en la dirección del Diccionario de la Música Española e Hispanoamericana, diez volúmenes de reciente edición por parte de la Universidad Complutense de Madrid y la Sociedad de Autores.

Gratitud a Dios y a sus hermanos jesuitas del Colegio San José de Valladolid, así como a los rectores del Archivo Diocesano, ha testimoniado López-Calo antes de pormenorizar el contenido de los ocho libros de que consta el proyecto editorial y de cada uno de los cuales se tirarán mil ejemplares.

Los seis primeros contienen el catálogo del archivo musical, mientras que los dos restantes reproducirán más de 6.000 documentos copiados directamente de los originales, sobre todo de las actas de las sesiones capitulares, donde se decidía todo lo referente a la vida del templo.

Cada tomo incluye detallados índices onomásticos, así como de los primeros versos de las numerosas composiciones en castellano con el fin de facilitar la identificación de las partituras anónimas o las de autoría dudosa y atribuida.

La obra permitirá un conocimiento más detallado de la música que se interpretaba en cada época, así como la que componían los maestros de capilla, el tipo de liturgia y los escenarios donde sonaba, ha añadido la concejala de Educación y primera teniente de alcalde.

Uno de los valores que atesora, según ha dicho uno de los responsables de la Obra Social y Cultural de Caja España, Galo Senovilla, es la posibilidad que abre a la interpretación en el momento actual de piezas de otras épocas.

El colofón de esta magna obra será la celebración de un concierto en la catedral de Valladolid, el próximo 12 de enero, a partir de un programa diseñado por el propio López-Calo y que abrirá una pieza de Pedro Aizpurúa, actual maestro de capilla de la Universidad de Valladolid, compuesta para la ocasión y que tocará en órgano.