El boliviano Diego Cabrera reinó en Colombia y el chileno Martel acumuló un segundo título

Bogotá.-  El boliviano Diego Cabrera reemplazó con creces este año al panameño Blas Pérez en el Cúcuta Deportivo de Colombia, mientras que el chileno Fernando Martel dio la vuelta olímpica con el Atlético Nacional de Medellín sólo cuatro meses después de llegar al fútbol 'cafetero'

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(EFE)

El jugador boliviano Diego Cabrera tiene contrato hasta junio de 2008 con el Cúcuta Deportivo, equipo que disputará la próxima edición de la Copa Libertadores de América.

Cabrera, de 25 años, arribó a la ciudad de Cúcuta en el segundo semestre de ese año con la meta de superar el punto alto que había dejado Pérez, de gran actuación también en la Copa Libertadores de América en la que su equipo llegó hasta semifinales, en una histórica campaña del conjunto de la frontera con Venezuela.

Él cañonero boliviano, que venía de jugar con el Aurora de su país, en el que había marcado 14 goles durante el primer semestre del año, se convirtió muy rápido en ídolo de la afición de Cúcuta por su gran olfato goleador.

Y lo confirmó al final de la temporada en Colombia, tras haber terminado segundo en la tabla general de anotadores del Torneo Finalización, con 15 goles, a solo uno del líder, el colombiano Dayro Moreno, del Once Caldas de Manizales.

Como mejor goleador extranjero, Cabrera sacó una ventaja de ocho goles a los segundos, el argentino Adrián Aranda, del Atlético Huila, y el brasileño Fernando Oliveira, del Deportes Tolima, que marcaron tantos cada uno.

"Estoy feliz por dejar el nombre del país en alto, eso para mí es un orgullo. Aquí en Colombia siempre digo que en Bolivia hay buenos jugadores, sólo hace falta darse una 'vueltita'", comentó Cabrera antes de viajar a su país, donde se encuentra de descanso.

El delantero tiene contrato hasta junio de 2008 con el Cúcuta Deportivo, equipo que disputará la próxima edición de la Copa Libertadores de América.

Su gran actuación con el Cúcuta ha permitido que los ojos de otros equipos internacionales se fijen en él, aunque el goleador asegura que de momento no hay nada concreto.

"Mientras no surja algo concreto tengo que respetar el contrato que tengo, pero me alegra que otros clubes se interesen en mí", afirmó, sin mencionar nombres de los equipos interesados.

Con sus resultados, Cabrera ha confirmado que atrás quedaron las noches de indisciplina de las que fue acusado en su país, que no le permitían destacarse como lo ha hecho en Colombia.

"Es que el tiempo ha pasado y maduré. Además, creo que la época que pasé fue propia de una persona joven. Los casos de indisciplina en los que estuve metido los relaciono más con los actos propios de los jóvenes. Eso ya quedó atrás, en la vida todo cambia y yo he cambiado, ahora estoy muy comprometido con el fútbol, y agradecido a Dios por las cosas que estoy disfrutando", había comentado Cabrera a su llegada al equipo colombiano.

Cabrera se siente ahora tranquilo por lo que pudo hacer en el Cúcuta, hecho que lo llevó a ser tenido en cuenta en la selección nacional de su país en los partidos de las eliminatorias sudamericanas del Mundial de Sudáfrica 2010.

Diego Cabrera nació el 13 de agosto de 1982 en Santa Cruz y ha jugado en Oriente Petrolero (1998 a 1999), Blooming (2000 a 2002 y 2006), The Strongest (2003 a 2004 y 2006), Bolívar (2005) y Aurora (2007), todos equipos de su país.

Además del Cúcuta Deportivo, boliviano el goleador integró la plantilla del Cerro Porteño de Paraguay (2003).

Por su parte, el chileno Martel, un atacante hábil con el balón e indispensable en el equilibrio del Atlético Nacional, dirigido por el técnico colombo-argentino Oscar Quintabani, se mostró feliz de sumar este año su segundo título profesional, pues el primero lo consiguió con el Alianza Lima de Perú en 2006.