Exposición reunirá por primera vez 40 piezas de Antón Faílde con moldes y bocetos

Ourense.-  Ourense, 28 dic (EFE) .- Una exposición reunirá por primera vez unas 40 piezas del escultor Antón Faílde entre las que se encuentran figuras en piedra, moldes de barro para sus bronces, dos tallas de madera y reproducciones de dibujos que hacía como bocetos de sus obras, según dijo hoy el comisario Mani Moretón.

ampliar foto

(EFE)

Miguel Ángel Faílde (2d) hijo del escultor Antón Faílde sostiene una figura de mujer en granito que formará parte de la exposición organizada por el Ayuntamiento de Ourense.

La exposición, que se celebrará a partir de enero, coincide con el primer centenario del nacimiento del artista natural de Ourense y fue presentada hoy en un acto al que asistieron el fotógrafo Mani Moretón -comisario de la exposición- un hijo del homenajeado, Miguel Angel Faílde, el teniente alcalde Alexandre Sánchez y la concejala de Cultura Isabel Pérez.

La muestra estará en el auditorio municipal, según Pérez, y supondrá un antes y un después para ese espacio cultural "ya que hasta ahora no se potenció como lugar para exposiciones pero sí se hará a partir de ésta de Faílde", matizó.

Por su parte, el comisario y fotógrafo Moretón explicó que la muestra estará dividida en cuatro espacios con diferentes contenidos ya que el primero tendrá siete piezas relativas al mundo femenino, esculpidas en granito rugoso "lo que le da un aspecto totalmente románico", subrayó.

Otro grupo de 15 piezas corresponderá a figuras estilizadas, representativas de un lenguaje gestual propio, elaboradas en granito de color blanco, a las que se sumarán dos tallas de madera y una veintena de piezas de barro, utilizadas por el autor fallecido en 1979 como moldes para sus bronces.

Moretón destacó la presencia en la muestra de una colección de dibujos que permiten "comprender el camino del artista de acercamiento a la obra final ya que se ve claramente que marcaba los trazos una y otra vez sobre sí mismos de forma que acaban pareciendo esculturas ya que se salen del papel".

El comisario definió a Faílde como el mejor escultor gallego del siglo pasado y a pesar de ello se ganaba la vida haciendo lápidas para los muertos, trabajo que alternaba con su labor artística que comenzó a reconocerse justo en el momento en que desapareció, según dijo.

Por su parte, el hijo del artista homenajeado señaló que poder colaborar en el recuerdo a su padre es el mayor placer para él y explicó que todas las piezas que se mostrarán pertenecen a la familia del autor ya que es reticente a venderlas, salvo en casos excepcionales y por un precio simbólico.

En ese sentido, también expresó su disponibilidad a ceder alguna obra para colocarla en la calle que lleva el nombre de su padre, en el barrio ourensano de As Lagoas "ya que si tienen que aguantarle el nombre, no veo mal que se les compense con algo más práctico, como una fuente de agua para los niños", agregó.

Recordó los últimos trabajos de su padre, al que ayudaba en ocasiones, y siempre en talleres a los que calificó de "agujeros" y en los que Antonio Faílde "buscaba la luz de la piedra a golpe de maceta y puntero, algo que hoy no hace nadie, ya que se usan al menos las máquinas rebarbadoras, pero la obra de mi padre era siempre el resultado de una gran lucha con el material".