Chávez duda de la hipótesis del niño y dice que Uribe no respondió a la petición del alto el fuego

Caracas.-  El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, expresó hoy sus dudas respecto a la hipótesis adelantada por su colega colombiano, Álvaro Uribe, de que Emmanuel, hijo de la secuestrada Clara Rojas, esté en Bogotá bajo el nombre de Juan David Gómez Tapiero.

En una llamada telefónica a un programa del canal estatal Venezolana de Televisión, Chávez dijo también que Uribe no ha respondido a la petición de que haya un cese el fuego para permitir la entrega de los rehenes que las FARC prometieron liberar.

"¿Un corredor dónde?", manifestó el mandatario venezolano, después de que Uribe anunciara que su Gobierno autoriza un corredor de seguridad en la selva para que el grupo guerrillero entregue a los secuestrados.

Respecto al niño, el gobernante se preguntó "por qué" Uribe habló "ahora y en Villavicencio" de esa hipótesis, sin más comprobaciones, aunque agregó: "Ojalá fuera cierto".

Asimismo, señaló que los delegados internacionales presentes en Villavicencio, entre ellos el ex presidente argentino Néstor Kirchner, posiblemente saldrán hoy de esa ciudad del centro de Colombia, algo que consideró "necesario" por razones de seguridad.

Chávez reanudó su conversación telefónica con una periodista de la cadena estatal después de la intervención del jefe de Estado colombiano en Villavicencio, base de la que debía partir la misión humanitaria para ir en busca de los rehenes en la selva.

Antes de interrumpir la llamada, el presidente venezolano indicó que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia le informaron en una carta que la entrega de los tres secuestrados que había prometido liberar se aplazaba por "intensos operativos" militares en Colombia.

"Insistir ahora sería poner en peligro" la vida de los rehenes y también de los guerrilleros designados para ejecutar la entrega de esas personas, dijeron las FARC en la misiva leída por Chávez, quien reveló que la recibió hoy a las 15.00 hora local (19.30 GMT) y que estaba fechada el domingo en las "Montañas de Colombia".

Chávez también abogó por un cese el fuego unilateral para permitir la entrega y dijo que estaba "casi seguro" que los delegados internacionales presentes en Villavicencio se lo plantearon a Uribe en la reunión que allí mantuvieron.

Tras la intervención de Uribe, transmitida en directo por la cadena estatal venezolana, Chávez reaccionó inmediatamente a las declaraciones de su colega colombiano.

Sobre la hipótesis de que Emmanuel, el hijo que Clara Rojas tuvo en cautiverio y que las FARC prometieron liberar junto con su madre y la ex congresista Consuelo González de Perdomo, esté en Bogotá, Chávez dijo: "Tengo bastantes razones para dudar, pero esperemos a ver".

El mandatario venezolano se preguntó "por qué, ahora y en Villavicencio" Uribe "hace pública una hipótesis de que las FARC no tienen a Emmanuel" y también "por qué" no terminaron las comprobaciones antes de informar sobre esta posibilidad.

Chávez, quien señaló que ya se estaba poniendo en contacto con la madre de Clara Rojas, abuela del niño, que está en Caracas a la espera de la entrega de los rehenes, indicó que su Gobierno está "listo" para que se pudieran hacer las pruebas necesarias de ADN, si así se consideraba.

"Ojalá fuera cierto", subrayó respecto a la hipótesis del presidente colombiano y añadió: "Quedarían mal las FARC ante el mundo (...), sería una evidencia de mentira, de manipulación".

Chávez se mostró, no obstante, muy cauteloso con esta hipótesis y consideró incluso que, al anunciarla hoy en Villavicencio, Uribe fue a "dinamitar" la tercera fase de la operación de rescate.

El gobernante venezolano expresó que hasta ahora no se ha topado "con mentiras de las FARC" y que tiene "razones para creer que sí hay operativos" en la zona colombiana donde se encuentra la guerrilla.

Chávez consideró que el presidente colombiano "no respondió a la solicitud de cese el fuego" que, en su opinión, debería abarcar un área de unos 500 kilómetros cuadrados, ya que no se sabe dónde puede darse la entrega de los rehenes.