Sarkozy: "No hay fecha de boda. Quizá se enteren cuando se haya producido"

Un gran 'show' mediático es lo que ha protagonizado ante medio centenar de periodistas el presidente francés Nicolas Sarkozy. Era su primer gran acto ante la prensa tras su llegada al Palacio del Elíseo, y parece que no ha defraudado. Muy vehemente, con aspavientos y gesticulando hasta el exceso, Sarkozy ha abordado todos los temas posibles del panorama nacional e internacional, con poca autocrítica y mucha ambición. Pero el presidente galo no ha podido evitar que la segunda pregunta de su comparecencia versara sobre su vida privada. "¿Va a casarse usted con Carla Bruni?" Y la respuesta ha dejado más dudas que certidumbres: "Todavía no tenemos fecha de boda, pero probablemente se enteren cuando ya haya ocurrido, y no es una amenaza".

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PHILIPPE WOJAZER (Reuters)

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, durante su comparecencia en el Palacio del Elíseo

La segunda pregunta de la joven periodista era directa. Y aunque en su respuesta dio muchas vueltas, Sarkozy dejó entrever a todos que su relación con la actriz italiana Carla Bruni va en serio y podría acabar en boda en los próximos meses. Antes de poner sobre aviso a los medios de que podrían enterarse de su matrimonio una vez dado el "sí quiero" en la intimidad, el inquilino del Elíseo se sorprendió del enorme interés que ha desatado su vida privada. "Es extraordinario que ustedes hayan esperado a la segunda pregunta... El mundo entero está en suspenso", ironizó Sarkozy.

Pero a la sorpresa ha querido añadir la crítica velada a sus antecesores, a quienes han rodeado numerosos comentarios acerca de sus relaciones privadas, amantes e hijos ilegítimos. "Dentro de la ruptura que quiero aplicar en mi manera de gestión como presidente está no actuar con la hipocresía y la mentira". Por ello, ha decidido no ocultarse de los fotógrafos y hacer cosas "normales" con su pareja, como pasear por Eurodisney o visitar las pirámides de Egipto.

Lo que ha quedado claro durante sus dos horas de comparecencia es que Alain Delon tiene difícil su propósito de ser el eterno galán del cine francés. Le ha salido un duro competidor, que ha ofrecido su gran puesta en escena en el teatro de la política con vehemencia, coquetería, seductora mirada y, en ocasiones, temperamento.

La retransmisión televisiva ha permitido comprobar como Sarkozy tiene conquistados a sus ministros, que asentían con sonrisas y reverencias sus manifestaciones sobre los temas más variados: desde la educación, la sanidad, la televisión pública, la reforma del mercado laboral, pasando por la gran política internacional (Europa, Oriente Próximo, la ONU). No se ha olvidado Sarkozy de su tema estrella, el que le lanzó al estrellato político: la inmigración y su crítica feroz a los que califica de "generosos" por pedir mayor flexibilidad en este asunto.

¿Qué destaca la prensa francesa?

Las ediciones digitales de los medios franceses coinciden en destacar el mensaje en clave interna del discurso de Sarkozy:

• En Le Monde apuestan por el mensaje de "política de civilización" con el que el presidente francés ha bautizado su proyecto de cambio y transformación de las instituciones del país (incluida la educación y la sanidad) y de la cultura francesa.
• El diario Le Figaro coincide en destacar el asunto de la "política de civilización", y resalta el anuncio de retirar publicidad de la televisión pública, introducir un nuevo preámbulo a la Constitución o fijar cuotas a los inmigrantes.
• Los compañeros de Rue 89 han apostado también por esta idea para titular su completa crónica online hecha en tiempo real.
• Le Parisien apuesta por un titular con mayor intención: "Sarkozy, por todas partes". El primer tema que destaca de su larga intervención es su relación con Carla Bruni y su posible boda en un futuro próximo.
• Por último, Libération apuesta por el anuncio de Sarkozy de eliminar las 35 horas laborales que se estableció en la época socialista de Lionel Jospin