El ministro de Defensa dice que el corazón de Piedad Córdoba está más con Chávez

Bogotá.-  La interlocución con la senadora colombiana Piedad Córdoba, antigua facilitadora de un acuerdo sobre rehenes con la guerrilla de las FARC, se hace difícil por el hecho de que el corazón de ella está más con el presidente venezolano, Hugo Chávez, consideró hoy en Bogotá el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos.

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(EFE)

"Parece que a veces ella (la congresista) estuviera más del lado de Venezuela que de Colombia". "Su corazón está más con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, que con el gobierno colombiano, y eso dificulta mucho la interlocución con ella", apuntó Juan Manuel Santos.

Santos observó que "parece que a veces ella (la congresista) estuviera más del lado de Venezuela que de Colombia".

"Además, su corazón está más con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, que con el gobierno colombiano, y eso dificulta mucho la interlocución con ella", apuntó el funcionario en declaraciones a la estación bogotana W Radio.

Santos se refirió a la manera como la congresista opositora al Ejecutivo del presidente Álvaro Uribe se ha acercado a Chávez, con quien ella realizó hasta noviembre último tareas formales en procura de un acuerdo humanitario sobre secuestrados con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Chávez asumió a mediados de agosto pasado como mediador por invitación de Córdoba, previamente autorizada por el Gobierno de Uribe, que el pasado 21 de noviembre canceló las gestiones de ambos, molesto por una comunicación telefónica de ellos con el comandante del Ejército colombiano, el general Mario Montoya.

En respuesta, el gobernante venezolano se declaró traicionado por su colega de Colombia y dejó en suspenso las relaciones bilaterales.

A pesar de la decisión de Uribe, Chávez y Córdoba prosiguieron con sus tareas ante las FARC, que en un gesto de desagravio anunciaron la entrega a ambos de dos mujeres del grupo de 45 personas que mantienen en condición de canjeables y al niño concebido en cautividad por una de ellas.

Chávez preparó una operación, con presencia de delegados internacionales, que puso el marcha el 27 de diciembre pasado y que terminó en fracaso cinco días después.

La misión llegó a su fin el mismo día en el que Uribe puso en duda que las FARC tuvieran en sus manos a Emmanuel, el niño de Clara Rojas, antigua fórmula electoral de la ex candidata presidencial colombo-francesa Íngrid Betancourt y a quien los rebeldes iban a liberar junto a la ex legisladora Consuelo González de Perdomo.

Unas pruebas de ADN permitieron establecer que Emmanuel, de padre guerrillero, es hijo de Clara Rojas.

El ministro colombiano de Defensa consideró que la legisladora Córdoba debe hacerse a un lado, por cuanto ella "se jugó una carta, y no le salió bien".