Estocada al orgullo italiano

Es una cuestión de orgullo patrio. Que España goce de un poder adquisitivo mayor que el de Italia, o no, que siempre hay maneras y maneras de leer los datos, ha pasado a un segundo plano.

A los italianos eso de que los españoles tengan una capacidad de compra superior a la suya les ha tocado la autoestima por mucho que los datos estén avalados por la Comisión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI). Aquí está en juego la supremacía nacional y un pueblo tan competitivo como el transalpino no iba a encajar la estocada taponando la herida sin más. El primer ministro, Romano Prodi, en persona, ha tenido que cuestionar públicamente la medición económica para levantar la moral de sus ciudadanos. Y es que las pulsiones siempre acaban ganando a la racionalidad. Claro que los españoles también tenemos nuestro corazoncito, chulería desde el punto de vista internacional. Y puestos a medirnos no nos gana nadie ¿o sí? La comparación que más toca la fibra sensible: Italia, cuatro mundiales ganados. España, ninguno. Empezamos bien.

Italia siempre ha sido el país de la moda. Esta semana, "Pitti Uomo" en Florencia.

MAURIZIO DEGL'INNOCENTI (EFE)

*Los mejores amantes. Los italianos, según el informe Durex 2006, practican sexo una media de 76 veces al año, mientras que los españoles lo hacen en 72 ocasiones. Y la puntilla la pone el estudio que coloca a los italianos como mejores amantes del mundo, elaborado por Gfk Custom Research Worldwide en 20 países. Por si fuera poco, una de cada cuatro europeas sueña con meter a un italiano en su cama. ¿Estereotipo o realidad? El gasto en piropos de los italianos tampoco conoce rival. No hay turista que salga de allí sin una reserva de halagos callejeros con los que tirar una buena temporada.

*Huelgas al día. Teniendo en cuenta las cifras de un informe del Parlamento italiano, en año y medio, entre enero de 2005 y junio de 2006, se celebraron tres huelgas al día, casi 1.600. En España, durante los diez primeros meses de 2007 se contabilizaron 654 huelgas, lo que significa que al día se produjeron 2,1 huelgas, según la CEOE.

*Errores médicos. Noventa muertos al día a causa de negligencias médicas en Italia -datos de Assinform- frente al 1,4 en España -Asociación Defensor del Paciente-. Merece la pena ponerse en manos de un facultativo patrio, si los cálculos no fallan.

*Mujeres en el poder. En los consejos de Administración españoles un 3,84% de sus miembros son mujeres, mientras que en los italianos sólo un 2% de los sillones están destinados a ellas. Ninguno de los dos casos es como para tirar cohetes.

*Industria textil. Moda italiana frente a española. La facturación de la industria en el un país considerado el rey del diseño es incontestable: 56.000 millones de euros anuales frente a los 13.000 nacionales -cifras de la revista del ICE (Instituto de Comercio Exterior).

*Arte. Si hablamos de arte clásico, no hay país en el mundo que se aproxime a sus tesoros. Y saltando al presente tampoco van mal servidos con la Bienal de Venecia, prestigiosa cita internacional. El polémico Maurizio Cattelan figura entre los artistas contemporáneos más cotizados. Y aunque España también posee sus joyas, en cantidad y calidad no les superamos.

*Burocracia. Hacer cola es uno de los quehaceres cotidianos de los italianos, como comprar el pan o poner la lavadora. Por ese motivo los ancianos y las embarazadas tienen preferencia ante la ventanilla, lo que incrementa la picaresca. En Italia colarse es un arte. Eso sí, cuando hablamos de cuánto tiempo se tarda en crear una sociedad limitada, en España ronda las tres semanas según la Comisión Europea frente a las dos semanas que hay que emplear en Italia.

*La buena mesa. La gastronomía es uno de los atractivos de ambos países. Italia se ha convertido en el primer productor europeo de alimentos ecológicos. El podium mundial del aceite de oliva es para España.

*En casa de mamá. A un 59% de los jóvenes italianos entre los 18 y los 34 años no hay quién les saque del nido familiar. El 67% de españoles que se resiste a dejar de disfrutar del servicio completo que les ofrecen sus padres tampoco se queda corto.

*Felicidad. Lo dice la Universidad de Cambridge: los italianos son desgraciados. Sólo un 35% se considera feliz lo que les coloca en el último puesto, el 15º, frente al 10º que ocupan los españoles.

¿Forza Italia o Viva España?