Correa cree tener la peor oposición posible y ve en 2008 más confrontaciones

Quito.-  El presidente de Ecuador, Rafael Correa, aseguró hoy que tiene la peor oposición posible, que no se manifiesta en partidos políticos sino en grupos de poder, con los que prevé mayores confrontaciones en 2008 que las que tuvo el año pasado.

ampliar foto

(EFE)

El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ayer, en la Universidad de Cuenca. Correa aseguró hoy que tiene la peor oposición posible, que no se manifiesta en partidos políticos sino en grupos de poder.

En una entrevista con el diario El Comercio, Correa, que el próximo martes cumple el primero de los cuatro años de Gobierno, aceptó hoy que por la forma vertiginosa como han ocurrido las cosas no parece que hubiese pasado un año desde que asumió el cargo, "sino 10".

Señaló que todo ha salido como lo planificado: la consulta popular y la Asamblea Constituyente, y añadió que "tal vez lo más duro de vencer es la burocracia que no tiene sentido de la urgencia".

El jefe de Estado puntualizó que él no ha terminado con la oposición política sino "el pueblo ecuatoriano", pero que ciertos medios de comunicación pretenden señalar que él ha concentrado todos los poderes y que no tiene oposición.

"Tengo una oposición mucho más desarrollada que en cualquier país desarrollado. La oposición no se expresa acá a través de partidos políticos, sino a través de grupos de poder", dijo al recordar ciertas actitudes de algunos integrantes de la Banca y medios de comunicación, así como de algunos empresarios y comerciantes.

Correa considera que "la oposición debe apoyar en ciertas cosas y tratar de lograr, en los puntos de divergencia, una síntesis superior a la tesis y a la antítesis" y anotó que el equilibrio de poderes es una condición de la democracia.

Según Correa, Ecuador está en un proceso constituyente de transición para llegar a una "verdadera democracia con un ejercicio de equilibrio de poderes donde todos tengamos que responder al mandante (pueblo). Y si un poder está obstruyendo al otro, el mandante podrá decir: 'o cambias de actitud o te vas a la casa'".

La "democracia liberal occidental" es el sistema político ideal para Correa, quien admitió ser "impaciente y eso se confunde con intolerante".

El jefe de Estado desestimó que su estilo de Gobierno sea la descalificación y aseguró que le impacienta, la "mediocridad, la mala fe y que no se reconozca esa mediocridad".

Para Correa, la prensa "es un actor político en este país y hay medios de comunicación que, abiertamente, están en contra del Gobierno".

El presidente indicó que si el año pasado fue difícil, "2008 seguirá siendo de la confrontación política y aún más".

"Sólo un insensato busca la confrontación, pero no nos engañemos: frente a un proceso de cambio es inevitable la resistencia", anotó al señalar que con la Asamblea Constituyente, "empezaremos a cambiar el sistema. Los grupos de poder van a poner mucha resistencia".

Esa resistencia, dijo, llegará de "ciertos grupos de Guayaquil (oeste), por ejemplo, que tienen afanes, no autonómicos sino separatistas y que habían hecho un feudo dentro del Estado".

Añadió que la resistencia también está en "las cúpulas de los partidos políticos que son mafias que no están dispuestas a perder privilegios" y en determinados grupos económicos "que han estado acostumbrados a no pagar tributos".

"Esos grupos acostumbrados a hacer lo que les da la gana se van a oponer con uñas y dientes a hacer un cambio", subrayó.

Correa cree que con su discurso no se ha exacerbado las tensiones sociales en el país sino que se ha "desvelado un conflicto que ha estado latente".