Michigan: Hillary contra sí misma

Las primarias estadounidenses llegan el martes al estado de Michigan. En el bando demócrata, la dirección del partido decidió no tener en cuenta los resultados, pues los órganos locales decidieron adelantar la fecha original de las votaciones para lograr notoriedad y un mayor peso político, algo que está en contra de la normativa interna de los demócratas.

(REUTERS)

Romney es el favorito en Michigan

Sólo cuatro estados pueden celebrar sus elecciones con anterioridad al cinco de febrero según las normas de los demócratas, por razones de historia y de representatividad. Éstos son Iowa, New Hampshire, Carolina del Sur y Nevada. Todos aquellos estados que adelanten la fecha pueden ser penalizados. Es el caso de Michigan, donde los demócratas han eliminado la validez de los votos. Los republicanos, que tienen una normativa parecida, se han limitado a reducir el número de delegados que saldrán de las votaciones de Michigan.

Entonces, los demócratas Obama y Edwards decidieron retirar su candidatura y centrarse en las campañas de otros estados, siendo Hillary Clinton el único peso pesado del partido que acude a las urnas. Sin embargo, los otros dos contendientes han emprendido una campaña para que sus seguidores tomen partido en las elecciones y escriban en la papeleta la palabra 'uncommited' ("no comprometido").

De este modo, nadie pone en duda la victoria de Hillary en estos comicios (a pesar de que tendría un valor meramente testimonial). Sin embargo, en el caso de un alto porcentaje de votos "no comprometidos", la sorprendente ganadora en New Hampshire recibiría un aviso de buena parte de los electores demócratas en favor de sus contrincantes. Así, en Michigan, Hillary tiene poco que ganar y mucho que perder.

En todo caso, las encuestas que ha hecho Detroit Free Press pronostican un 56% de votos para Clinton y un 30% "no comprometidos"

Desde el pasado miércoles, los seguidores de Obama en Michigan han emprendido una campaña de publicidad para promover el voto "no comprometido". "Michiganders for Obama", "Michigan for Edwards" y "Detroiters for Uncommitted Voters", son tres grupos que han hecho publicidad en radio, campañas puerta a puerta y también telefónica. La cifra de estos votantes podría ser alta, ya que los seguidores de Obama y Edwards acudirían en el mismo bando. Y no hay que olvidar que Edwards no es una mera comparsa (ocupó el segundo lugar en Iowa y en New Hampshire se hizo con casi el 17% de los votos).

Más igualdad entre los republicanos

En el bando republicano sigue la incertidumbre. Y es que Mitt Romney tiene una oportunidad dorada para dejar de ser el eterno segundón (ha ocupado la segunda plaza tanto en Iowa como en New Hampshire). Y es que acude a su tierra natal, donde su padre ya fue gobernador, con el respaldo de las encuestas (aunque con el precedente de New Hampshire hay que tener reservas al interpretar las encuestas). Romney cuenta con el respaldo del 27% de los republicanos, mientras que McCain lo hace con el 22%, según las encuestas de Detroit Free Press (la diferencia se estrecha a un solo punto de margen según las previsiones de The Detroit News).

Michigan es uno de los estados que más están sufriendo la recesión económica. En la zona se encuentran los principales fabricantes de coches de Estados Unidos (General Motors, Chrysler y Ford), los cuales están atravesando tiempos difíciles, lo que ha provocado que Michigan tenga la tasa de paro más alta del país (casi el doble que la media nacional). Es ésta la razón por la que los discursos de los candidatos están enfatizando el discurso económico.

Esta tendencia aparece a nivel nacional, pues los candidatos en su conjunto se están centrando en su programa económico. Esto se debe a que la preocupación de los votantes por su propia economía es la mayor en los últimos 18 años, según una encuesta que publica hoy The New York Times. Además, esta semana se reanuda la actividad en el Congreso, donde la economía ocupará un papel predominante.

Esto se traduce en que los discursos electorales van a centrarse más en aspectos económicos (en sustitución de la Guerra de Irak, que en las últimas fechas constituía el principal argumento). Obama, por ejemplo, desglosó sus propuestas económicas durante el pasado domingo, las cuales incluyen una inversión de 75.000 millones de dólares para reactivar la economía.