El Gobierno brasileño endurece las sanciones contra quienes degraden la Amazonía

Brasilia.-  El Gobierno brasileño anunció hoy que aplicará sanciones económicas a los responsables de la degradación de la Amazonía, después de admitir que las tasas de deforestación en esa región registraron en 2007 un aumento "nunca visto".

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(EFE)

El Ministerio del Medio Ambiente informó ayer que, según datos preliminares, la Amazonía perdió 3.235 kilómetros cuadrados de bosques en los últimos cinco meses del año pasado.

Tras una reunión en la que participaron el presidente del país, Luiz Inácio Lula da Silva, y siete de sus ministros, la titular de Medio Ambiente, Marina Silva, dijo que los hacendados y dueños de empresas en cuyas tierras se compruebe una alta tasa de degradación no podrán recibir más créditos públicos.

También advirtió de que el Gobierno podría llegar a expropiar los terrenos, en caso de que el derribo de árboles supere los niveles autorizados.

El Ministerio del Medio Ambiente informó ayer de que, según datos preliminares, la Amazonía perdió 3.235 kilómetros cuadrados de bosques en los últimos cinco meses del año pasado, lo que calificó como un aumento "nunca visto" de las tasas de deforestación.

No obstante, el Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales dijo que esa pérdida de floresta en los últimos meses del 2007 podría ser en realidad superior a los 7.000 kilómetros cuadrados, una vez que se cuente con todos los datos consolidados.

Según el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés), la Amazonía brasileña, que representa el 60 por ciento del llamado "pulmón del planeta", ha perdido ya casi el 18 por ciento de sus siete millones de kilómetros cuadrados, que atesoran la reserva biológica más rica que existe en el mundo.

Silva explicó que los peores índices fueron identificados en 36 de las 603 ciudades que forman parte del ecosistema amazónico, las cuales serán objeto de medidas especiales, como un aumento de la vigilancia policial y del número de fiscales ambientales.

En esos municipios, que pertenecen a los estados de Mato Grosso, Pará, Rondonia y Amazonas, quedará además prohibido el derribo de árboles durante un plazo aún no establecido.

La ministra dijo que Lula le ha pedido que se reúna a la mayor brevedad con los alcaldes de esas ciudades, a fin de coordinar los trabajos de vigilancia y represión a los responsables de que, por primera vez desde 2005, haya aumentado el ritmo de deforestación.

Silva insistió en que la expansión de la frontera agrícola es en parte responsable de ese aumento de la tasa de deforestación, aunque el ministro de Agricultura, Reinhold Stephanes, negó que haya habido un aumento de los cultivos o la producción agrícola en esas zonas.