La corte electoral advierte de la imposibilidad de afrontar la avalancha de consultas

La Paz.-  La Corte Nacional Electoral (CNE) de Bolivia advirtió hoy de que no podrá organizar los 17 referendos previstos para este año y que su capacidad se limita a dos consultas nacionales y una en cada uno de los nueve departamentos del país.

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(EFE)

En Bolivia está previsto celebrar este año tres referendos nacionales, entre ellos, uno sobre la posibilidad de revocar los mandatos del presidente y vicepresidente del Gobierno.

"No creo viable, por el tema de plazos, hacer tres referendos nacionales" como hay "anunciados", dijo el presidente de la CNE, José Luis Exeni, en una conferencia de prensa celebrada en La Paz.

En Bolivia está previsto celebrar este año tres referendos nacionales, entre ellos, uno sobre la posibilidad de revocar los mandatos del presidente y vicepresidente del Gobierno.

Las otras dos consultas se refieren al proyecto constitucional impulsado por el Gobierno de Evo Morales: uno para dirimir el artículo referido a los límites sobre la propiedad de la tierra y el otro para ratificar la nueva Carta Magna de Bolivia.

Pero, además se han anunciado más consultas de ámbito regional o departamental, en concreto, los referendos revocatorios para los nueve gobernadores y los destinados a ratificar los estatutos autonómicos propuestos por cuatro regiones: Santa Cruz, Tarija, Beni y Pando.

Por su parte, la región de Chuquisaca también se plantea organizar un plebiscito sobre su autonomía y sobre la capitalidad de Bolivia, dada la pugna entre Sucre, la capital constitucional del país pero que sólo alberga al poder judicial, y La Paz, donde residen el Legislativo y el Ejecutivo.

En total, según Exeni, son "alrededor de 17 referendos", lo que calificó de una "efervescencia e ímpetu democrático" que "por separado" no va poder ser asumida por la CNE.

Exeni propuso como solución "pensar en una lógica de eventos concurrentes", es decir, celebrarlos agrupados, por los plazos y además por el "alto costo de cada convocatoria", según dijo unos 50 millones de bolivianos (más de 6,7 millones de dólares).

Tanto el Gobierno como la oposición buscan en las urnas, especialmente en los referendos revocatorios, una salida a la crisis que vive Bolivia, con varias regiones enfrentadas al Gobierno nacional y con el proceso de reforma constitucional estancado.

"En Bolivia nos hemos caracterizado por enfrentarnos hasta las penúltimas consecuencias y al momento de dar el salto al abismo, resolvemos las diferencias en las urnas", sentenció Exeni.

Ninguno de los funcionarios de la CNE presentes en la conferencia quiso pronunciarse sobre la convocatoria de referendo sobre el proyecto de estatuto autonómico del departamento de Santa Cruz, que se celebrará el 4 de mayo según han decidido las autoridades regionales.

Insistieron en que, por su condición de máximo órgano jurisdiccional en materia electoral, cabe la posibilidad de que deban resolver algún recurso y un pronunciamiento ahora podría comprometer su independencia.

La legalidad del proceso cruceño está siendo objeto de discusión entre juristas y analistas, ya que muchos opinan que un estatuto autonómico sólo puede derivar de una Constitución que lo reconozca y el oficialismo advierte que eso no sucede en la Carta Magna vigente.

Pero desde Santa Cruz se argumenta que el artículo 4 de la actual Constitución boliviana habilita el proceso autonómico, cuando dice que el pueblo gobierna por medio de sus representantes, la Asamblea Constituyente, la iniciativa legislativa ciudadana y el referéndum.

Otro de los aspectos polémicos reside en que el referéndum fue convocado por el prefecto, el opositor Rubén Costas, y, según la norma, es competencia del Congreso Nacional en tanto no exista un gobierno departamental elegido por sufragio directo