El premio Velázquez se sitúa en el meollo del arte de tendencia con Meireles

La elección de Meireles, Río de Janeiro 1947, supone la internacionalización del Velázquez a través de un artista brasileño consolidado. La voluntad de César Antonio Molina de tender puentes culturales con Iberoamérica, la elección de Brasil como país invitado a ARCO y la recurrente solicitud que se hace a la feria de crear lazos con el arte de Sudamérica son algunos de los factores que han podido determinar la concesión del premio. Otros se relacionan con la trayectoria rompedora y emergente de la obra de Meireles: el Velázquez apuesta por el arte que determina la tendencia de mercado. Eso sí, se asegura la apuesta galardonando a Meireles, un artista consagrado y de reconocido prestigio.

El trabajo de Cildo Meireles siempre ha estado caracterizado por su interés en cuestiones sociales y su enorme capacidad para transformar las ideas en sólidas formulaciones plásticas. Sus obras se han movido entre la pintura, la instalación, la escultura, el dibujo, sin despreciar ningún recurso que pueda servir como soporte físico a su trabajo. Incluso conceptualmente se ha movido por caminos muy diferentes. Como él mismo reconoce, siempre ha estado trabajando con objetivos distintos en el mismo momento. El resultado es una suma. Es un poco como la vida, que es algo tan amplio todo el tiempo, tan grande.

El ready made -la recuperacion de un objeto de uso cotidiano para ser insertado en el circuito del arte y por tanto, resignificado-, es sin duda, un elemento habitual en su trabajo, pero con un giro de tuerca más, incluso inserta sus piezas de nuevo en el mercado. Así lo hizo en 'Inserciones en los circuitos ideológicos' con 'El proyecto Coca-Cola', una de sus obras más reproducidas y en la que dibujó, en una cantidad nunca precisada de botellas de Coca Cola, la frase: Yankees Go Home, cuando éstas todavía se reciclaban, devolviéndolas al circuito comercial de modo que acabaron siendo distribuidas nuevamente con esta consigna.

Su trabajo ha mostrado una gran capacidad para desbordar la esfera de lo puramente artístico y trasladar sus reflexiones a la sociedad con un marcado interés en los aspectos políticos y éticos que se dan en los objetos y también en el uso de los mismos como consumo masivo. Cuando habla de sus referentes, cita a Goya y sus grabados, aunque en conversación con José Jiménez, comisario de la exposició 'El final del Eclipse' (2001) y hoy director General de Bellas Artes y Bienes Culturales, comentaba que quizá si hubiera que hablar de lo que constituye para él un modelo de objeto artístico habría de citar sin duda 'La Guerra De Los Mundos' de Orson Welles.

En la 11 Documenta de Kasel en 2002 bajo el titulo: 'Disappearing Element / Disappeard Element (Imminent Past),' 2002 -Elemento que desaparece / Elemento desaparecido (pasado inminente)- pone a la venta por toda la ciudad de Kassel, en unos carritos ambulantes, helados de agua, a un euro; como diría Carlos Basualdo, co-comisario de la Documenta 11, por un lado alude a la inminente y progresiva escasez de agua a escala global, por el otro trata de cuestionar las nociones de valor de uso y valor de cambio, recurrentes en la obra de Meireles.

Artista del ready made, de la instalación, de la provocación y la conciencia social Cildo Meireles se suma a la lista de los premios Velázquez que en anteriores ediciones han sido otorgados a Luis Gordillo (2007), Antonio López (2006), el mexicano Juan Soriano (2005), Pablo Palazuelo (2004), Antoni Tàpies (2003) y Ramón Gaya Pomes (2002).

*Ramón Mateos es nuestro colaborador de arte.