La familia Cubas insiste en que Lugo es sospechoso de contactar con los secuestradores

Asunción.-  La ex primera dama de Paraguay, Mirta Gusinky, insistió hoy en que para su familia el ex obispo y candidato presidencial Fernando Lugo sigue siendo sospechoso de haber contactado con los secuestradores de Cecilia Cubas, hija del ex jefe de Estado, Raúl Cubas (1998-1999).

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(EFE)

Gusinky respondió en esos términos al pedido de disculpas realizado en la víspera por Lugo (en la imagen), quien afirmó que quizás restó importancia al secuestro y posterior asesinato de Cecilia Cubas, en 2005.

Gusinky respondió en esos términos al pedido de disculpas realizado en la víspera por el ex prelado, quien afirmó que quizás restó importancia al secuestro y posterior asesinato de Cecilia Cubas, en 2005.

"No soy perfecto, acepto que mi expresión no fue la más feliz, y pido mil disculpas, sobre todo a la familia (Cubas), dijo Lugo, contra quien se recrudecieron en las últimas semanas las acusaciones sobre su presunta vinculación a grupos de secuestradores paraguayos.

Por su parte, la ex primera dama dijo que acepta la disculpa del ex prelado y candidato presidencial de la opositora Alianza Patriótica para el Cambio (APC), aunque aseveró que la postura del mismo podría formar parte de una estrategia política de su campaña electoral para los comicios generales del 20 de abril próximo.

"Los políticos cuando están en carrera, apelan a cualquier cosa", apuntó Gusinky.

El propio jefe de Estado, Nicanor Duarte, ha vinculado reiteradas ocasiones al ex prelado con dos sonados casos de secuestro, incluido el que acabó con la vida de Cecilia.

Las autoridades asuncenas involucraron a miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en el asesoramiento de las negociaciones de la banda de secuestradores con la familia Cubas, que pagó alrededor de 300.000 dólares por la liberación de la joven.

Al respecto, la ex primera dama recordó que la Fiscalía paraguaya acusa al colombiano Rodrigo Granda y al otro dirigente de las FARC, conocido por el alias de "Raúl Reyes", de haber mantenido un fluido intercambio con los miembros de la banda que secuestró a Cubas para asesorarlos en las negociaciones con la familia.

"Raúl Reyes", portavoz de esa agrupación terrorista, falleció el sábado pasado durante una incursión militar colombiana en territorio ecuatoriano que derivó en una crisis entre Ecuador, Colombia y Venezuela, éste último en apoyo a las autoridades de Quito.

Lugo, que apareció a finales de febrero en afiches en Asunción atribuidos al Partido Colorado, en el Gobierno desde hace 61 años, como "embajador en Paraguay de las FARC" con el rostro montado en un uniforme camuflado, se había puesto a disposición de la Fiscalía tras esas acusaciones.

El ex prelado, suspendido "a divinis" por el Vaticano tras renunciar en diciembre de 2006 a su estado clerical para dedicarse a la política, aseveró además el lunes pasado que "quiero reafirmar que no estoy de acuerdo con ningún grupo que promueva la violencia, ni de las FARC, ni de cualquier otro grupo".

El principal juicio por el secuestro y asesinato de Cubas finalizó en diciembre de 2006 con la condena a penas de hasta 25 años a doce de los quince primeros procesados, en su mayoría del minoritario partido de izquierda Patria Libre (PPL).