España aclara que los brasileños rechazados en Barajas no llenaban los requisitos

Brasilia.-  El embajador de España en Brasil, Ricardo Peidró, aclaró hoy a las autoridades brasileñas que los ciudadanos de este país recientemente rechazados en el aeropuerto de Barajas no llenaban los requisitos comunitarios para entrar a la Unión Europea.

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(EFE)

Peidró (en la imagen) precisó que anualmente viajan a España cerca de 250.000 brasileños y que la media de personas rechazadas se sitúa en torno de una de cada cien.

Peidró fue convocado por el Ministerio de Relaciones Exteriores para discutir la negativa de ingreso que ciudadanos brasileños han recibido en España, que, según una nota oficial difundida hoy, ha "causado profundo desagrado" al canciller Celso Amorim.

El embajador explicó a Efe que el "espíritu" de la reunión que tuvo hoy con el vicecanciller, Samuel Pinheiro, fue "enormemente amistoso, como corresponde al nivel de las actuales relaciones" entre Brasil y España.

"Hemos coincidido en hay que evitar que estos temas perturben la densidad y la fluidez de las relaciones en todos los ámbitos", entre los que citó los políticos, comerciales y culturales, entre otros, dijo Peidró.

El diplomático señaló que en tres recientes casos de estudiantes que no pudieron ingresar a España, que han tenido amplia difusión en la prensa brasileña, la única coincidencia es que "no cumplían los requisitos que pide no España, sino la Unión Europea (UE)" para la entrada de ciudadanos extracomunitarios.

Esas condiciones, dijo Peidró, "son bien conocidas y básicamente se trata de que la persona que entra pueda acreditar sus medios de subsistencia, el tiempo y objetivo de su estancia".

Indicó que "el país (comunitario) de entrada debe hacer respetar las normativas" y supone una "primera puerta" en la que se ejerce una "criba aleatoria, no sistemática, porque sino se colapsarían los aeropuertos".

Peidró precisó que anualmente viajan a España cerca de 250.000 brasileños y que la media de personas rechazadas se sitúa en torno de una de cada cien. "Cuando hay una denegación de entrada, se traduce en una salida", indicó.

El embajador señaló que España es, además, puerta de entrada a Europa para toda Latinoamérica y que por esa condición se produce "un fenómeno global que afecta a todos los países".

Dijo que, en el caso de Brasil, las denegaciones son numerosas por su propia "dimensión demográfica", dada por sus 180 millones de habitantes, y porque para los brasileños España es el segundo destino turístico y también el segundo destino para estudios de posgrado, después de Estados Unidos.

Esa llegada masiva, señaló, se "traduce en algunos rechazos de personas que van de buena fe" pero no cumplen con todos los requisitos para ingresar a un país comunitario.

Tras la reunión con el vicecanciller brasileño, el embajador dijo que se intentará reforzar la difusión ya existente de los requisitos necesarios para ingresar a España, con el objeto de "minimizar estos incidentes, que son lamentables pero no constantes", apuntó.

Explicó que, entre otros actores, "las compañías transportadoras deben colaborar de la forma que puedan", divulgando "de una forma intensa esas condiciones" de ingreso.

Esa divulgación deberá hacer hincapié en las "ventajas y las desventajas" que se presentan para, por ejemplo, los brasileños, que no precisan de un visado para ingresar a la UE, indicó.

"En países que exigen visados hay cero rechazos, pero en los que no los exigen los controles se aplican en los aeropuertos", dijo el embajador español.

En el comunicado difundido hoy por el Ministerio de Relaciones Exteriores, se dice que el canciller Celso Amorim había manifestado "hace pocas semanas" a su homólogo español Miguel Ángel Moratinos la "insatisfacción" del gobierno brasileño con la "repetición de tales medidas restrictivas".