Sacyr se marcha de Eiffage sin obtener plusvalías y abandona la vía judicial

Madrid.-  El grupo constructor español Sacyr ha vendido a inversores institucionales franceses el 33,32% que tenía en Eiffage a 62 euros por acción, el mismo precio al que compró, una operación que incluye el desestimiento de las acciones judiciales emprendidas por ambas partes durante dos años de enfrentamiento.

A pesar de que con la venta ambas compañías renuncian a mantener sus disputas en la vía judicial, el proceso que instruye el Tribunal de Gran Instancia de París podría continuar al tratarse de una causa penal, en la que el juez ha imputado tanto a Sacyr como a su presidente, Luis del Rivero.

Si el juez decide seguir adelante con este proceso, el grupo español tendrá que responder de la presunta "difusión de informaciones falsas y engañosas" y de haber actuado en concierto con el resto de accionistas españoles.

Entretanto, Sacyr ha optado por salir del accionariado de una compañía en la que nunca ha sido bienvenido sin obtener ganancia alguna, al desprenderse de sus 30,9 millones de acciones por un importe total de 1.920 millones de euros.

Para el grupo español esta venta termina con "una situación de conflicto que se estaba prolongando en el tiempo y permitirá a Sacyr dedicarse a otras iniciativas", mientras que para la constructora gala pone fin a "la entrada no solicitada" del grupo español y le permite "pasar página".

Los compradores son inversores institucionales franceses, entre los que se encuentra el banco estatal Caisse de Dêpots et Consignations (CDC) que ha confirmado la adquisición del 10,95 por ciento del capital de Eiffage que suma al 8,5 por ciento que ya tenía.

Eiffage entiende que la entrada de estos inversores institucionales dará "estabilidad y calidad" al accionariado de la compañía, que ve así garantiza "la consecución de su desarrollo y la creación de valor en beneficio del conjunto de sus accionistas".

A pesar de que ni Sacyr ni Eiffage especifican quiénes son los compradores, el pasado 9 de abril informó de que había alcanzado un acuerdo para vender su participación Eiffage a un grupo de inversores franceses entre los que estaban, además de CDC, las aseguradoras AXA, CNP, AGF y Groupama, y el banco BNP Paribas.

En este sentido, Eiffage ha reconocido que había sido informada de la operación de venta y de la identidad de los compradores, pero ha recordado que sus estatutos no condicionan el traspaso de acciones a la previa autorización de la sociedad.

Sacyr, por su parte, asegura que los responsables del grupo galo han estado siempre al tanto de la operación y le han dado el visto bueno.

Los recursos obtenidos con esta venta se destinarán a la cancelación de los diferentes préstamos que financiaban la inversión en Eiffage y que a 31 de diciembre ascendían a 1.713 millones de euros.

Los 207 millones restantes se utilizarán para reducir el endeudamiento corporativo de la compañía, "que ve así reforzada su posición financiera".