Sesenta periodistas asisten a la primera jornada del caso Andratx

Palma.-  Más de sesenta periodistas acreditados, entre redactores, cámaras y fotógrafos asisten hoy a la jornada inicial del juicio del llamado "caso Andratx", primera gran causa de corrupción urbanística en Mallorca, que se celebra en la Audiencia Provincial de Palma.

Desde primera hora de la mañana todos han estado pendientes de la llegada de los cuatro acusados, el ex alcalde de Andratx Eugenio Hidalgo; el ex director autonómico de Ordenación del Territorio y jefe del área de Urbanismo del Ayuntamiento de Andratx, Jaume Massot; el ex abogado asesor del consistorio, José Ignacio Mir; y el ex celador del Ayuntamiento, Jaume Gibert.

El primero en llegar a la Audiencia de Palma, acompañado de su abogado, fue Hidalgo, sin corbata, vestido con pantalones vaqueros y americana de color claro.

Algo más tarde llegaba sólo y por su propio pie el ex director general de Ordenación del Territorio, Jaume Massot, y minutos después el abogado José Mir y el ex celador, Jaume Gibert.

El ex alcalde de Andratx se mostró tranquilo durante toda la mañana y se dejó captar por cámaras de televisión y fotógrafos, fumando con calma, durante los distintos descansos de la jornada.

Hidalgo respondió a las preguntas de pie, frente al tribunal constituido por tres jueces y presidido por Juan Catany, durante dos horas y media, y rechazó hacer uso de una silla.

El ex alcalde, principal encausado, manifestó durante su comparecencia su faceta menos conocida, la de abuelo, al justificar una conversación intervenida por la Fiscalía Anticorrupción, en la que le encargaba al ex celador Gibert que buscara "un pony manso", en su voluntad de hacerle un regalo a su nieto.

A pesar de haber reconocido que había sacado muebles y comprado un tractor, para aparentar que la caseta era una nave agrícola, Hidalgo aseguró que la adquisición del pony se debió a que su nieto "tenía ya cinco años y quería comprarle uno, como cualquier abuelo y como se estila en Mallorca".

Uno de los jueces del tribunal preguntó con ironía al imputado si pensaba dedicar la edificación "a criar cerdos" o si consideraba que "hacer una 'torrada'" era darle un uso agrícola a la finca.

El ex asesor jurídico del Ayuntamiento de Andratx, José Mir, contestó durante algo más de una hora, vestido con la tradicional toga de los letrados y desde el banco que ocupan los mismos a las preguntas del fiscal y los abogados de la acusación particular y la defensa.

El ex director general de Ordenación del Territorio, Jaume Massot, pidió una silla y pasó dos horas respondiendo al interrogatorio de fiscales, acusación particular, defensa y jueces.

Uno de los asuntos más controvertidos de su intervención fue la aclaración de por qué recomendó a las funcionarias de Urbanismo del Ayuntamiento cambiar la denominación de "aseo", del proyecto de obra de Hidalgo, por "cuarto higiénico" en el expediente abierto contra él por infracción urbanística.

Según Massot, lo hizo porque esa es la denominación que determina el decreto de habitabilidad y por tanto hacía hincapié en que la obra era una vivienda y por tanto ilegal.