Chávez, Jagdeo y Venetiaan son los únicos que se mantienen desde la primera cumbre de Unasur

Brasilia.-  El venezolano Hugo Chávez, el guayanés Bharrat Jagdeo y el surinamés Runaldo Ronald Venetiaan son los únicos gobernantes suramericanos que en el 2000 estuvieron en la primera cumbre regional y asistirán a la que se celebrará mañana en Brasilia.

ampliar foto

(EFE)

La primera cumbre fue convocada por el entonces presidente de Brasil, Fernando Henrique Cardoso, propulsor del proyecto de lo que ahora es la Unión Suramericana de Naciones (Unasur).

La primera cumbre fue convocada por el entonces presidente de Brasil, Fernando Henrique Cardoso, propulsor del proyecto de lo que ahora es la Unión Suramericana de Naciones (Unasur) y a quien el 1 de enero del 2003 sucedió en el cargo el ex obrero metalúrgico Luiz Inácio Lula da Silva, anfitrión de la cita de esta semana.

La foto de familia de esa primera cumbre, que como la de mañana tuvo como sede Brasilia, es una prueba de cómo han cambiado las cosas en Suramérica en los últimos ocho años.

En el 2000 participaron los entonces presidentes de Argentina, Fernando de la Rúa; Bolivia, Hugo Bánzer; Colombia, Andrés Pastrana; Chile, Ricardo Lagos; Ecuador, Gustavo Noboa; Guayana, Bharrat Jagdeo; Perú, Alberto Fujimori; Surinam, Runaldo Ronald Venetiaan; Paraguay, Luis González Macchi; Uruguay, Jorge Batlle; y Venezuela, Hugo Chávez.

Salvo Chávez, Jagdeo y Venetiaan, únicos que repetirán presencia, todos adherían en mayor o menor grado al "Consenso de Washington" y eran tildados de neoliberales por las corrientes de centroizquierda o izquierda que imperan hoy en la región.

Una excepción a esos cambios la encarna la presidenta chilena Michelle Bachelet, cuyo Gobierno sigue bajo el ala de la amplísima coalición que apoyaba entonces a Lagos.

En Colombia los conservadores siguen en el poder con Álvaro Uribe, pero en otros países se han dado fuertes virajes hacia la izquierda.

El caso más radical es el del Bolivia, representada en el 2000 por el ya fallecido general golpista Hugo Bánzer y que ahora tiene en el Gobierno a Evo Morales, aimara, ex cocalero y socialista.

Así como ocurrió en Bolivia, tras la aguda crisis institucional de los últimos años, el izquierdista Rafael Correa llegó al poder en Ecuador, que en 2000 era gobernado por el conservador Gustavo Noboa, quien ese mismo año había sido designado presidente por el Congreso, tras el derrocamiento de Jamil Mahuad.

Un giro a la izquierda, aunque moderada, ha habido también en Uruguay con el presidente Tabaré Vázquez, quien rompió la hegemonía secular que mantenían los conservadores, y el mismo camino parece haber tomado Paraguay, con la reciente elección de Fernando Lugo.

En Argentina, Cristina Fernández continúa el rumbo trazado por su esposo y antecesor, Néstor Kirchner, muy distinto al tomado por Fernando de la Rúa, quien estuvo en la cumbre del 2000 y un año después renunció al cargo tras huir de la Casa Rosada en helicóptero en medio de unas violentas protestas.

En el caso de Perú, en vez de Alberto Fujimori, hoy en la cárcel y enjuiciado tras su fuga del país en diciembre del 2000, está en el poder otra vez Alan García, quien entonces vivía en Colombia exiliado.

El proceso que comenzó hace ocho años en la capital brasileña ha tenido continuidad con las cumbres realizadas en 2002 en Guayaquil (Ecuador) y en 2004 en Cuzco (Perú), donde se formalizó la creación de la Comunidad de Naciones Suramericanas.

Bajo ese nombre se celebró una primera reunión de gobernantes en 2005 en Brasilia que puso en evidencia las grandes debilidades del proceso integrador.