Adiós, inmobiliarias, adiós

MADRID.-  Hace tan sólo un año, la mayoría de los barrios de cualquier ciudad española contaba en su haber con al menos cinco o seis agencias inmobiliarias. Ahora, se trata de una especie casi extinta.

Mactiste (Flickr)

En 2007, unas 700 agencias inmobiliarias echaron el cierre, según el informe sobre el sector de las franquicias que elabora anualmente Tormo & Asociados. Pero son "miles" las agencias que han cerrado desde mediados de 2006, como nos comenta Emiliano Bermúdez, subdirector de Don Piso, un número que "se ha incrementado desde agosto del año pasado", cuando estalló la crisis de las hipotecas 'basura' (subprime) en Estados Unidos.

Esta visible desaparición tiene su causa directa en el descenso de las operaciones de compraventa, que el subdirector de Tormo & Asociados, Miguel Ángel Oroquieta, cifra en un 30%, y en la falta de confianza de los bancos para conceder hipotecas.

Las más afectadas

La catalana Tecnocasa ha sido una de las empresas especializadas en intermediación inmobiliaria más afectada por la crisis. Cerró el ejercicio pasado con 667 oficinas, 385 menos de las que tenía a finales de 2006. Pero también se han visto afectadas Fincas Corral, cuya red ha quedado reducida a menos de la mitad en el último año, y Expofincas, que ha presentado concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos), ya que acumula una deuda de 10 millones de euros con la banca que no ha logrado refinanciar.

Don Piso, por su parte, ha echado el cierre a 33 de sus agencias entre enero de 2007 y marzo de 2008; pero habrá que esperar a ver qué ocurre con las 120 oficinas propias, que la red perteneciente a la inmobiliaria Habitat prevé cerrar, salvo que sus empleados acepten la oferta de convertirse en franquiciados y corran con los gastos de manutención de los respectivos locales.

Al mal tiempo, buena cara

Pese a haber sufrido estos descalabros, la gran mayoría de las redes inmobiliarias valora este ajuste de forma positiva, y considera que era "necesario" para "limpiar" el sector de "advenedizos que vieron un negocio fácil y que ahora desaparecen porque vender ya no es tan fácil y no tienen capacidad ni formación para afrontar los cambios", como nos comentan desde Re/Max.

Precisamente la formación se ha convertido en uno de los pilares básicos en los planes de reestructuración de las franquicias inmobiliarias para hacer frente a la crisis. Además, se buscan nuevos canales de comunicación para compartir información, por lo que Internet se convertirá en una herramienta indispensable, y se apuesta por ofertar otros servicios de valor añadido, como los relacionados con financiación y seguros.

Según el subdirector de Tormo & Asociados, el futuro de las franquicias inmobiliarias pasa por un movimiento de fusiones y absorciones, que crearán redes "con más valor añadido para conseguir mayor presencia". Cifras más concretas apunta el subdirector de Don Piso, que estima que "entre el 20% y el 25% de las pequeñas agencias que operan actualmente en el mercado español acabarán por integrarse en grandes redes de franquicia". Este proceso de concentración dará lugar, en opinión de Bermúdez, a "un mercado global de gran escala", donde sólo se mantendrán "entre cinco y diez grandes grupos".

Otra salida: cruzar la frontera. Así lo han hecho ya insignias como Alfa Inmobiliaria, que ha apostado por Rumanía; Don Piso, que ha entrado en Portugal; o Fincas Corral, que ha hecho lo propio en Hungría.