La que se nos avecina con las huelgas del transporte

Las consecuencias de la subida del precio de los carburantes planea sobre el país. El caos podría llegar a España a partir de la próxima semana. La huelga de transportistas para el próximo día 8 de junio sigue en pie y los armadores no tienen intención de desconvocar su paro. Mientras, los taxistas madrileños se han unido esta mañana a la protesta con una manifestación.

Salvador Sas (EFE)

El puerto de Vigo.

Los profesionales dedicados al transporte ya no pueden más. Según el Boletín Petrolero de la Unión Europea, el gasoil ha subido un 20% desde el mes de enero y casi un 40% desde mayo del año pasado. La situación, cada vez más insostenible, ha generado una cadena de manifestaciones y paros que pronto empezaremos a notar los consumidores.

Si no hay nada que lo impida, y parece que no va a ser así, el domingo a las 00:00 horas, la Federación Nacional de Transportistas (FENADISMER) comenzará una huelga de transportes indefinida. Los camioneros españoles no saldrán a las carreteras porque económicamente no les compensa hacerlo y si la situación se prolonga podría desembocar en desabastecimiento de los mercados e incluso, según el propio Gobierno, podría suponer la quiebra de empresas. La situación ataca los nervios al ministro de Economía y vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, y sin embargo según la propia Federación no se está poniendo ninguna solución. Dicen que la reunión del miércoles con Fomento no sirvió de nada por lo que el paro podría durar mínimo hasta el día 12 de junio, cuando se celebre la reunión con el Grupo de Trabajo encargado de la aprobación del nuevo Observatorio de Costes.

Tampoco fue de utilidad el encuentro mantenido por la Confederación Española de Pesca (CEPESCA) con el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, por lo que los armadores han asegurado que no tienen intención de poner freno al paro indefinido hasta que el propio presidente del Gobierno tome conciencia de esta situación.

La imagen del puerto de Vigo lo dice todo: los barcos atracados porque no les compensa salir a faenar. Así es la situación en los principales puertos pesqueros de toda España. Según CEPESCA, el 80% de los barcos ya no salen al mar y para la próxima semana se espera que esta cifra se eleve al 100%. Por lo pronto, los barcos del Gran Sol están regresando a los puertos más cercanos porque no quieren obviar la huelga. En sólo cinco años el carburante ha subido un 320%, de 0,12 euros/litro a 0,75 euros/litro, pero sus precios tienen los mismos niveles que hace 20 años. Denuncian no sólo la subida desorbitada de los carburantes sino también que son los intermediarios los que obtienen beneficio de su trabajo.

Más allá de España

La situación no afecta sólo a España sino que es de alcance mundial y de momento no se dan soluciones satisfactorias. Ayer pescadores europeos se manifestaron en Bruselas porque la única respuesta obtenida, tras una reunión frustrada con el comisario de pesca Joe Borg, es que a corto plazo todo va a seguir igual. En poco tiempo las calles de la ciudad se convirtieron en un campo de batalla. La revuelta terminó con tres policías heridos y 74 detenidos, de los que 14 pasaron a disposición judicial.

Los paros del sector pesquero se extienden también a los camioneros. Desde Francia hasta La India hay convocados paros por esta subida de los carburantes. En la localidad gala de Marsella a estas manifestaciones se han unido los taxistas que son otros de los más perjudicados por esta situación.

También los taxistas españoles

La Confederación del Taxi de España no se pronuncia sobre un posible paro general aunque ya se ha empezado a mover fichas. Los alrededor de 16.000 taxistas madrileños han sido llamados esta mañana a una manifestación para protestar por esta subida de carburantes y pedir la supresión del céntimo sanitario que sólo funciona en algunas Comunidades Autónomas.

(EFE)

Alrededor de 200 taxistas se han colapsado Madrid.

Según Francisco Esteban, presidente de AGETAXI — entidad convocante del paro— "se pretende que las autoridades tomen alguna medida porque en sólo unos meses el carburante ha pasado de suponer menos de un 10% del gasto de un taxista a ser un 15%". Según dice, "lo ideal sería que se estableciese un gasóleo profesional diferenciado pero eso parece prácticamente imposible porque en Europa no están por la labor".

La convocatoria no ha recibido el apoyo unánime de los taxistas madrileños porque la principal agrupación de la capital, la Agrupación Empresarial del Taxi, no la ha querido secundar. Julio Moreno, su secretario general, asegura que están de acuerdo con las peticiones pero están a la espera de una reunión con el concejal de movilidad por lo que "sería una irresponsabilidad".

El sector de los taxis es uno de los que más ha notado la crisis. La subida de los carburantes ha supuesto un incremento de 1.848 euros en sus gastos generales pero además, han notado un descenso de usuarios. Según aseguran, ahorrar en transporte es uno de las principales medidas adoptadas por los españoles para hacer frente a esta situación.