El "corazón" de la Academia Puertorriqueña de la Lengua Española deja de latir

San Juan.-  La Academia Puertorriqueña de la Lengua Española (APLE) lamentó la muerte hoy en Pamplona (España) de la coautora del Tesoro Lexicográfico del Español de Puerto Rico y a la que llamaban "el corazón de la academia", la española María Vaquero.

(EFE)

Vaquero era licenciada en Filosofía y Letras con especialidad en Filología Románica por la Universidad de Salamanca (1959).

La administradora de la APLE, Maia Sherwood, explicó a Efe que Vaquero, de 70 años, padecía un cáncer y desde hacía un año había regresado a Pamplona, donde murió a las 3.00 de la madrugada hora española (01.00 GMT) acompañada de sus familiares más cercanos.

"Por más de cuatro décadas, desde la Academia, la cátedra, los foros internacionales y la divulgación periodística, María Vaquero dedicó sus más altos esfuerzos intelectuales al estudio, la defensa y la valoración de la lengua española y, en especial, del español de Puerto Rico", indicó el director de la APLE, José Luis Vega.

Vaquero, que se había jubilado recientemente de su cargo de secretaria de la APLE, era licenciada en Filosofía y Letras con especialidad en Filología Románica por la Universidad de Salamanca (1959).

En 1965 obtuvo su primer doctorado en la Universidad de Puerto Rico con especialidad en Lingüística Hispánica y en 1978 se doctoró en la Complutense de Madrid, con especialidad en Filología Románica.

Vaquero ingresó a la APLE en 1991 con un discurso titulado "Palabras de Puerto Rico" y en 1994 asumió la secretaría de la Academia Puertorriqueña.

"Su compromiso con esta institución y su trabajo incansable en ella hicieron que muchos la llamaran, con total razón, 'el corazón de la Academia'", recordó Vega, quien reconoció a Vaquero como la causante de que la APLE sea una hoy una "institución dinámica y productiva".

"Entre sus logros de mayor repercusión figura la publicación en 2005 del Tesoro Lexicográfico del Español de Puerto Rico, en coautoría con su colega y amiga Amparo Morales", señaló Vega.

Vaquero fue también académica correspondiente de la Real Academia Española (1991), de la Academia Nacional de Letras de Montevideo, Uruguay (1996), y de la Academia Norteamericana de la Lengua Española, con sede en Nueva York (2001).

Durante sus 35 años en la Universidad de Puerto Rico, impartió veinte cursos graduados diferentes, buena parte de su propia creación, y dirigió treinta tesis de maestría y doctorado.

Dictó cursos graduados en universidades e instituciones de numerosos países e "inspiró a cientos de estudiantes la fascinación por el idioma y, en Puerto Rico, creó un nuevo interés, aprecio y orgullo por el español puertorriqueño".

Sus compromisos internacionales y en Puerto Rico no impidieron, según Vega, que su obra investigadora resulte "trascendente, tanto por su volumen como por su profundidad", lo que demuestra que se incluyera su trabajo en publicaciones como El español de América o Atlas lingüístico de Hispanoamérica.

Describió el léxico de Puerto Rico "con rigor no exento de amenidad y finura" en su libro "Palabras de Puerto Rico" y "En Palabras son palabras" se recopilan sus columnas periodísticas durante ocho años dedicadas a temas lingüísticos.

"Vaquero fue una mujer luchadora que demostró tanto en la Academia Puertorriqueña y en la Universidad, como en sus escritos y obras, su defensa constante de los valores de la hispanidad y la lengua", insistió Vega.