Funcas cree que las deslocalizaciones empiezan a remitir y no afectan tanto al empleo

Madrid.-  La segunda ola de deslocalizaciones de empresas que está viviendo España desde 2004 está "empezando a remitir muy lentamente" y este fenómeno no ha afectado tanto al empleo como se piensa, según el análisis de varios expertos recogido en la última publicación de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas).

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(EFE)

El catedrático de Economia Aplicada de la Universidad Complutense de Madrid, Rafael Myro Sánchez.

En el último número de "Papeles de Economía Española", que edita la fundación, los analistas señalan que, en términos de destrucción de empleo, las deslocalizaciones producidas en los últimos cinco años representaron el 4,2 por ciento de los 80.000 puestos de trabajo perdidos.

Los analistas de Funcas se remiten al último informe del Observatorio Europeo de Reestructuraciones, que asegura que entre 2002 y 2007 de las 185 casos de reestructuraciones empresariales que hubo en España sólo el siete por ciento aparecieron asociados a fenómenos de deslocalización.

Los profesores de la Universidad Complutense de Madrid, Rafael Myro y Carlos Manuel Fernández-Otheo, argumentan que los fenómenos de deslocalización (traslado de una empresa a otro país) pueden llegar a tener efectos "positivos".

Argumentan que los ajustes que generan en las plantillas de las empresas "no son de gran magnitud y no dicen nada sobre el empleo final que generan las empresas" que han sido deslocalizadas.

Estos dos expertos señalan que en los próximos años podría darse una retirada de capital extranjero de la economía española, con "ajustes de alguna trascendencia" en importantes sectores como el cuero, el calzado, la madera y los muebles.

En cualquier caso consideran que esta destrucción de empleo se verá compensada, como ya se está viendo, por la expansión de las plantillas de otras empresas y por la entrada de otras actividades manufactureras, "sin que se constate una merma del tejido industrial en su conjunto".

Tras apuntar que la segunda ola de deslocalizaciones de empresas españolas "está empezando a remitir muy lentamente", recuerdan que esta última fase ha sido más intensa que la primera, a principios de los años 90, y se ha dirigido hacia los países de la ampliación de la Unión Europea y hacia economías emergentes como China e India, con gran potencial industrial.

Por otra parte, según el director del Instituto Complutense de Estudios Internacionales (ICEI), Antonio Alonso, los efectos de los procesos de multilocalización -cuando las empresas dividen y especializan sus distintos centros de producción- están siendo, hasta el momento, "relativamente limitados".

En su informe, Alonso asegura que la elevada productividad que generan los procesos de multilocalización de las empresas favorece la contratación de mano de obra y reduce los costes, ya que la especialización es "cada vez mayor" por la fragmentación de las tareas de producción.