Manhattan Transfer y Pedro Iturralde recorren la memoria del jazz

San Javier (Murcia). 11 de julio.- (EFE).-Llenazo en el Auditorio del Parque Almansa en la localidad murciana de San Javier para gozar de un espectáculo de música feliz.-  San Javier (Murcia). 11 de julio.- (EFE).-Llenazo en el Auditorio del Parque Almansa en la localidad murciana de San Javier para gozar de un espectáculo de música feliz, amena y apta para todos los públicos con Manhattan Transfer.

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(EFE)

El grupo de jazz vocal The Manhattan Transfer durante su actuación en el XI Festival Interancional de Jazz de San Javier (Murcia).

Con más de 30 años grabando y actuando, lo más sorprendente es que siguen haciendo lo mismo; no han cambiado la fórmula: dar al público lo que pide, los temas consabidos y alguno nuevo del último disco.

Esto es América, o mejor, Nueva York, la descrita por John Dos Passos en su novela, de la que tomaron el nombre. La Gran Manzana, la calle 42 y Broadway, los teatros, los musicales, las variedades. El show es cien por cien "made in Usa", de esos que empiezan con una especie de 'érase una vez' y continúan adentrándose en añorados días de radio. Swing ligero y elegante.

Nadie discute lo bien conjuntadas que están siempre las voces del afamado cuarteto neoyorquino, compuesto por Tim Hauser, que sigue siendo el filósofo del grupo y hipster frustrado; Cheryl Bentyne pone la nota fresca y llamativa, Janis Siegel es la acólita de Ella Fitzgerald, y Alan Paul es el crooner ligeramente dandy que se mueve entre el swing y los orígenes del rock-and-roll.

Un equipo compenetradísimo, peripuesto y pulcro, disciplinado hasta la estandarización: ensayadas coreografías, algunos solos y dúos?Si ya les has visto, pueden parecer rutinarios, pero la primera vez no hay duda de que son el perfecto grupo de entretenimiento.

Logran su propósito con trucos zalameros y un escogido repertorio de temas acaramelados de deliciosa accesibilidad, que alternan con otros de más brío, abarcando varias décadas de recorrido por la historia del jazz y de la música popular, de Louis Jordan - "Choo Choo boogie" rompió el fuego - al "Tutu" de Marcus Miller, Louis Amstrong, Count Basie o Jon Hendricks, partituras solventes ajenas al paso del tiempo y guiños al costumbrismo.

Acompaña al cuarteto vocal una competente banda dirigida por el pianista Yaron Gerchovsky; que contribuye al feliz resultado final demostrando que el swing fluye con naturalidad, sin necesidad de que brazos y piernas sufran luxaciones.

La técnica vocal es admirable. Haciendo scat o imitando la trompeta con sordina, destaca el elegante fraseo de Janis Siegel, aunque puedan producirse situaciones sonrojantes, como cuando Tim Hauser enronquece la voz emulando a Amstrong, o cuando los cuatro simulan hablar con Jesús en el gospel telefónico "Operator".

El timbre de alarma sonó justo a tiempo, y el grupo se desperezó con sus grandes éxitos: 'Soul Food To Go" de Djavan, "Cuentáme qué te pasó" de Al Castellanos y "Chanson D'Amour", que puso al público en pie. Un ameno espectáculo para una noche estival.

Un veterano Pedro Iturralde, pleno de bríos, ofreció en Jazz San Javier un memorable concierto de jazz. Iturralde recorrió su fructífera trayectoria,- desde el bebop al flamenco jazz pasando por el folclore vasco y andaluz.

El saxofonista navarro es un músico cultivado y audaz, que cambia de aires con la naturalidad y el aplomo con que cambia de instrumento: del clarinete al piano, del saxo soprano al tenor...

"Este concierto es como la historia de mi vida" explicó el maestro, y se dispuso a contar sus comienzos en una orquestina de pueblo que hacía música de baile, sus giras por el mundo o a hablar de los músicos con los que ha tocado.

Un medley rememoró a Gershwin, Ellington, Benny Goodman, Artie Shaw y Sonny Rollins. Iturralde echó mano del "Summertime" de Gershwin y el "Sophisticated lady" de Ellington, al clarinete y sin acompañamiento del grupo, que entraría a renglón seguido con "I got rhythm". Y tocó el saxo tenor para culminar con un clásico de Sonny Rollins..