Nuria Amat asegura que los escritores escriben "lo que no se cuenta en las familias"

Santander.-  La autora barcelonesa Nuria Amat ha asegurado hoy que los escritores se dedican "a escribir lo que no se cuenta en las familias", en referencia a su próxima novela, protagonizada por el anarquista que asesinó a Leon Trotsky, Ramón Mercader, y cuyo primer borrador ultima estos días.

Nuria Amat ha explicado que la idea de esta novela "surgió por pura necesidad", ya que Mercader era "pariente lejano" de su padre, pero en su casa no se hablaba de él porque "era tremendo hablar de este personaje".

La escritora, que participa en los "Martes Literarios" de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en Santander, ha comentado que se trata de una obra con "mucha ficción", pero "muy documentada", que transcurre en la Barcelona de la Guerra Civil, por lo que no habla del asesinato de Trotsky, "aunque hay referencias".

Amat, para quien "es importante que en la literatura haya pensamientos" además de emociones, ha confesado que esta novela, cuyo primer borrador está acabando, es "la gran pasión" que vive en estos momentos.

La autora de "Reina de América" y "El país del alma" ha afirmado que espera que pueda publicarse "en un año o año y medio", ya que escribe "tres o cuatro versiones de cada novela" y, aunque maneja "varios títulos", no ha querido revelar ninguno, ya que los decide "muy al final".

Respecto a la invitación que ha recibido de la Cátedra Julio Cortázar de la Universidad de Guadalajara (México) para dar una ponencia, Amat ha asegurado que supone un "notición", ya que es "lo máximo que te pueden dar en literatura española", al haber sido escogida por Gabriel García Márquez y Carlos Fuentes.

La escritora ha avanzado que el tema sobre el que versará su conferencia, que tendrá lugar el próximo 25 de noviembre, será "escribir en tiempos confusos".

Esta bibliotecaria "de oficio" para quien "escribir es como una enfermedad que se cura con palabras" ha asegurado que no le gusta que la etiqueten, lo que hace que la crítica la haya catalogado de escritora "invisible", al no estar "dentro del grupo de lo que se llama la literatura femenina".

Según Amat, los críticos han puesto la etiqueta de "literatura femenina" a un grupo de escritoras que reivindican determinados temas, lo que "las ha perjudicado", porque "en España y en toda Latinoamérica hay prejuicios para leer literatura escrita por mujeres".

"No me gustan las etiquetas, porque creo que los escritores tenemos que ser un poco outsider", ha recalcado Amat, quien ha considerado que decir literatura de género femenino es "como decir literatura judía, literatura negra, o literatura homosexual".

La autora de "Amor Breve" ha afirmado que huye de esas etiquetas porque "el mundo de los hombres y las mujeres cada vez se parece más" y "porque en una gran novela está todo", y ha citado los personajes femeninos creados por Tolstoi como ejemplo de credibilidad.

Esta escritora, que siempre ha creído "que escribir era una forma de decir lo que no se puede decir de ninguna otra manera", ha asegurado que los escritores tienen "un trabajo muy solitario, entre cuatro paredes".