El Palacete del Embarcadero muestra la realidad de la guerra vista por Goya

Santander.-  Los 82 grabados que Goya pintó para mostrar la realidad y "brutalidad" de la Guerra de la Independencia, aunque sin tomar partido "por nada ni nadie", podrán ser contemplados desde hoy en el Palacete del Embarcadero, de Santander, gracias a la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).

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(EFE)

La comisaria de la muestra, Carmen Ana Sierra (d), charla con una periodista, momentos antes de la inauguración esta tarde en el Palacete del Embarcadero de la capital cántabra de la exposición de grabados de Goya "Goya, su visión de la guerra", organizada por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en colaboración con la Autoridad Portuaria.

En colaboración con la Autoridad Portuaria de Santander, la UIMP ha trasladado a la capital cántabra la colección completa de grabados titulada "Los desastres de la guerra", que Goya pintó entre 1810 y 1820 y que es propiedad de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.

La comisaria de la exposición, Carmen Ana Sierra, ha destacado hoy en conferencia de prensa la "modernidad" de esta obra de Goya, ya que, a su juicio, los grabados contienen imágenes que podrían representar una guerra de cualquier época, incluso actual.

Sierra ha asegurado que Goya refleja en esta obra que no estaba interesado "ni en el héroe, ni en el bueno, ni en el malo", sólo en mostrar la realidad y el "horror" que supone una guerra.

"Los desastres de la guerra" se dividen en tres bloques de grabados denominados: 'Asuntos Bélicos', 'Hambruna' y "Los Caprichos Enfáticos', aunque Carmen Ana Sierra ha distribuido esta exposición de otra forma: 'El Porqué', 'Las mujeres', 'El hambre', 'Enterramientos', 'Iglesia' y 'Los Caprichos enfáticos'.

La comisaria de la exposición cree que esta es una de las muchas divisiones que se podrían hacer de la obra de grabados de Goya, en la que recuerda que no existe una unidad ni una continuidad, sino una "simple" narración de lo que el pintor veía a su alrededor.

La muestra, que podrá verse hasta el 15 de agosto, ha sido expuesta en otras ciudades, aunque nunca fue vista por los contemporáneos de Goya, ya que "nadie habría aguantado el realismo desgarrador" de estos grabados, ha opinado Carmen Ana Sierra, quien dirigirá en la UIMP un curso sobre esta obra del pintor aragonés.

Sierra analizará con sus alumnos estos grabados, que Goya realizó al final de la guerra contra los franceses y comienzos de la época absolutista de Fernando VII, rey del que fue pintor.

De hecho, "Los Caprichos Enfáticos" muestran mediante imágenes metafóricas la vida en España tras la vuelta de Fernando VII y el rechazo que a Goya le producía este régimen absolutista, que le llevó a su destierro en Burdeos (Francia).

La comisaria de la muestra ha opinado que Goya siempre estaba "alejado" de sus contemporáneos, ya que en su obra "no tomaba partido por nada ni nadie" y sólo intentaba explicar lo que ocurría a su alrededor.

Los grabados de Goya no definen las figuras, ni describen los paisajes, son imágenes que podrían "verse en cualquier lugar, en cualquier época", son obras que intentan "dar una lección de lo que es la guerra", asegura Sierra.

"Vemos cosas que podemos aplicar a brutalidades de cualquier época", añade la comisaria, quien aun así destaca tres grabados en los que Goya muestra también la "esperanza" que siempre tiene un hueco ante la guerra.

Aunque Goya hizo los grabados entre 1810 y 1820, la primera edición de las láminas no se realizó hasta 1863 por la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.